Dicha revisión técnica tiene como fin obligar a los propietarios a someter a sus rodados a un chequeo anual para verificar estado de los frenos, tren delantero, luces, electricidad, cinturones de seguridad, estado de las ruedas, entre otros aspectos.

Tal revisión, que se exige en la mayor parte del país, no tiene nada que ver con la verificación de números de motor, chasis, puertas y cristales que se realiza actualmente para la transferencia de vehículos.

Aunque el Ministerio de Seguridad, encargado de llevar adelante la licitación, ya apeló el fallo judicial ante la Quinta Cámara en lo Civil con el fin de revertirlo, no tuvo más remedio que suspender el proceso.

La causa fue que se le había pasado la fecha para que las empresa que buscaban la adjudicación presentaran la oferta económica.

Así lo confirmó el propio jefe de la cartera, Leonardo Comperatore: “Notificamos a las siete empresas que participan de la licitación que si bien hemos apelado, por resolución las convocamos para devolverles el depósito porque se pasó la fecha del 20 de noviembre, que era la fijada para presentar los sobres”.

El ministro explicó, además, que el proceso judicial se desató porque dos de las firmas aspirantes cuestionaron que era demasiado breve el plazo de 14 días que les había otorgado el pliego para presentar la documentación.

Ante esto, acudieron a la Justicia, una en el Gran Mendoza y otra en San Rafael.

Comperatore explicó: “Decidimos, autorizados por la Fiscalía de Estado, extender el plazo por 30 días más para que presentaran los papeles”.

“Tras esto –continuó–, en San Rafael, el juzgado archivó la causa porque ya se había cumplido con el requerimiento, pero aquí, en Mendoza, el 24º Juzgado Civil sentenció que el primer plazo era exiguo y que la ampliación no la tendríamos que haber otorgado, dejando sin efecto la licitación”.

El funcionario especuló que es muy probable que la Cámara Civil no resuelva hasta el año que viene y que inclusive se vean obligados a modificar la fecha tope de instrumentación prevista para el 1 de marzo próximo.

El nuevo sistema de revisión técnica obligatoria tiene prevista la instalación de varias plantas en la provincia, fijas y móviles, para atender adecuadamente la demanda que tendrá el parque automotor a nivel local.

►600 mil vehículos cuenta aproximadamente el parque automotor en Mendoza, que serían clientes cautivos de la revisión técnica obligatoria a partir de los dos años de antigüedad del modelo.

La oposición denuncia poca transparencia en el proceso 

Los senadores radicales Juan Carlos Jaliff y Armando Camerucci denunciaron que con la caída de la licitación de la revisión técnica obligatoria por orden de la Justicia Civil “se comprueba la falta de transparencia que habíamos advertido cuando en abril de 2014 algunos legisladores nos opusimos a la modificación de la Ley Provincial de Tránsito”.

En un comunicado, los legisladores indicaron: “Este proceso es poco transparente, necesita prudencia y racionalidad para que no se convierta en un escándalo por sospechas de direccionamiento de un negocio millonario”.

Los cuestionamientos fueron respondidos por el ministro de Seguridad, Leonardo Comperatore, que destacó que a pesar de que la ley le había dado facultades para hacer contrataciones directas sin necesidad de licitar, se había elegido el proceso de licitación para dar total transparencia.

El ministro desechó las críticas y aseveró: “Creemos que estamos bien con el proceso que iniciamos y a pesar de lo ocurrido, vamos a revertir en la Cámara la decisión judicial lo que nos permitirá reencauzarlo”.

Un sistema que se utiliza en casi todo el país

Hace rato que cada verano que pasa llueven las novedades y los comentarios de mendocinos que tuvieron problemas en las rutas de otras provincias porque la policía local les exigió una revisión técnica obligatoria que sus automóviles no tenían.

El anecdotario está lleno de estos infortunios, en los que se encuentran desde aquel que tuvo que entregar unos pesos al uniformado para que hiciera la “vista gorda” hasta el que se llevó una sustanciosa multa.

En varias provincias argentinas, la revisión que garantiza el buen estado del vehículo es una realidad que las fuerzas policiales exigen cumplir en la rutina de todos los días.