Mientras espera que en pocos días se aclare el panorama electoralista que mantiene al Congreso de la Nación con escasa actividad y poco lugar para tratar temas sectoriales, como puede resultar el del comercio minorista de combustibles, el Senador Basualdo prometió retomar iniciativas de su autoría relacionadas con la actividad estacionera.

Dentro de esos proyectos, se encuentra esperando su tratamiento en comisión, aquel que establece la obligatoriedad para las Estaciones de Servicio de GNC de contar con una silla de ruedas para el uso de las personas con movilidad reducida por cada seis bocas de carga.

Al ser consultado el legislador de la Provincia de San Juan sobre las causas de la diferencia de pedirlas solamente para las operadoras de gas y no para las que expenden combustibles líquidos, respondió a surtidores.com.ar que “el ENARGAS establece que para poder realizar la carga de GNC todas las personas deben descender obligatoriamente del automóvil”.

Agregó que de esta manera se genera un problema para las personas con alguna discapacidad motora. Con esta norma se les facilitaría el descenso del vehículo, para poder así cumplimentar la regla que impone el Estado Nacional.

Recordó además que los establecimientos deben contar con una dársena o isla de carga que se encuentre ubicada en los laterales de la Estación y que posea el espacio necesario para el traslado de dicha silla, sin que ello ponga en peligro el movimiento de las personas con discapacidad.

Aclaró finalmente que de ser sancionada esta ley, no implicará un perjuicio contra el expendedor, sino que, “el hecho de aumentar la accesibilidad de las personas en Estaciones de Servicio inclusivas, abrirá las puertas a los derechos de todos los consumidores en igualdad de condiciones”.

Aseguró que “la idea es que las expendedoras también sean protagonistas de la construcción de una sociedad con mayor inclusión y más respeto el uno con el otro, evitando las restricciones que impidan desarrollarse como personas, como lo hacemos todos”.