El Intendente, llamado Quique por Cristina Fernández durante la inauguración del Instituto de Matemática Aplicada, se retiró muy ofuscado ya que había “operado” con el personal de protocolo de la Nación para saludar a la Presidenta en la videoconferencia y finalmente el que intercambió conceptos fue el gobernador Poggi.
Vestido con su nuevo traje gris plata, Quique Ponce se disponía a llevarse la atención del acto cuando la Presidenta le diera el saludo formal y este dialogara con la mandataria. Situación que no sucedió y sólo le llevó un tibio saludo presidencial a raíz de la movilización de militantes políticos.
Dicen en el entorno de Quique Ponce, que el jefe comunal pegó un fuerte grito de bronca “nos dejó el oído finito, casi como su voz aguda”, comentó un allegado al Intendente a raíz de los reproches de este por no tener protagonismo en el acto.
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