Irónicamente, el día que el fiscal penal, Santiago López Soto, pidió el juicio y la prisión preventiva contra Sebastián “Cuchi” Ramos por la salvaje agresión contra el periodista y director de FM Profesional, Martín Grande, el sujeto quedó en libertad.

Así lo dispuso la jueza de garantías 8, Claudia Puertas, y el decreto se cumplió ayer por la tarde. Después de golpear salvajemente hasta lograr desmayar a Martin Grande, el hijo del diputado justicialista Eduardo Abel Ramos goza de la libertad.

La jueza consideró que en caso de recaer en condena, la misma sería de ejecución condicional, con lo que no se justificaba dictar su prisión preventiva. Ramos no cuenta con condenas anteriores. Además, y primando en el caso el principio de libertad, estimó oportuno imponer medidas sustitutivas.

Las medidas impuestas son de cumplimiento obligatorio, ya que en caso de incumplir alguna de ellas de manera injustificada, podría revocarse la libertad concedida.

Así, mientras dure el proceso, Ramos deberá presentarse en la Fiscalía todos los lunes; constituir domicilio y comunicar cualquier cambio; abstenerse de salir de la Provincia y del País sin autorización del Tribunal; abstenerse de acercarse al denunciante, su grupo familiar, su lugar de trabajo, domicilio particular o lugares que suela frecuentar.

Además de ello, deberá abstenerse de ejercer actos de violencia física o psicológica contra la víctima, de mantener cualquier tipo de contacto por algún medio y someterse a un tratamiento psicológico a efectos de contener los impulsos violentos.

Ramos hizo entrega hoy al Tribunal de su pasaporte.