En medio de un contexto de pandemia que obliga a todos a permanecer encerrados, ya resulta extraño, o quizás ajeno, pensar en la realización de actividades deportivas y de esparcimiento colectivo. Tal vez sólo imaginarlo genere algo de nostalgia. Y pensar en la construcción de un parque natural, recreativo y cultural, directamente parece utópico.

Sin embargo, más de una vez se dijo que la política es el arte de lo posible. Y el Concejo Deliberante salteño, dio cuenta de ello esta semana, al sancionar una ordenanza que propone convertir el ex basural de La Pedrera en un Parque Natural Municipal.

La iniciativa, elaborada por la concejala Ana Paula Benavides, sugiere que el espacio se denomine “Parque del Otoño” y que sea inaugurado el próximo año, en conmemoración al bicentenario del paso a la inmortalidad del General Martín Miguel de Güemes. Precisamente, en el lugar donde se emplazaría el parque, comienza el llamado “Circuito Histórico Gaucho”, recorrido que se realiza todos los años para homenajear al prócer salteño.

El proyecto contempla el saneamiento ambiental de la zona, la parquización y forestación del predio y la instalación de infraestructura para la realización de deportes, actividades recreativas y culturales.

Según Benavides, la iniciativa “surgió de la conjunción de la idea de hacer un parque temático que tenga un atractivo turístico y la necesidad de resolver una problemática de años de los vecinos de la zona de La Pedrera”. La concejala del bloque Salta Independiente explicó que mucha gente “usa este lugar como un basural, arrojando residuos y degradando un espacio que podría ser mucho más bonito”. En ese sentido, el proyecto busca transformar el predio en “un verdadero activo ambiental”.

Entre los fundamentos, la iniciativa menciona que el Plan Integral de Desarrollo Urbano Ambiental II (PIDUA II), califica este sector de la ciudad como “paisaje herido”. Por tal motivo sostiene que “convertir este inmueble abandonado en un parque de la magnitud que se proyecta, otorgaría la posibilidad de desarrollar actividades recreativas y deportivas con un perfil ambiental, en una zona actualmente degradada”.

Seamos realistas, pidamos lo imposible

La ordenanza sancionada el último miércoles insta al Ejecutivo comunal a llevar adelante las tareas de “saneamiento, recomposición y remediación de la superficie del predio, para la utilización permanente como espacio público y área de recreación”.

Entre los trabajos encomendados al Municipio, se incluyen: parquización y forestación del predio; construcción de veredas y caminerías, incluyendo reseñas de la historia del General Martín Miguel de Güemes; instalación de juegos infantiles, integradores y circuitos aeróbicos; construcción de un anfiteatro y sanitarios; colocación de mesas, bancos, bebederos y cestos de residuos.

También se pide al Ejecutivo la planificación de una zona de esparcimiento “en donde se promuevan deportes en contacto con la naturaleza como: senderismo, orientación, excursionismo, ciclismo de montaña y actividades educativas”.

Finalmente, la ordenanza autoriza al gobierno comunal “a gestionar ante los gobiernos nacional y provincial los recursos necesarios para la ejecución de las obras”.

Si bien el proyecto fue acompañado por casi todos los espacios políticos, al momento del tratamiento, el concejal Santiago Alurralde advirtió: “Lo más difícil va a ser llevarlo a la ejecución”. El edil del bloque Salta tiene Futuro reconoció que “el momento económico no es el mejor” para la creación del parque, pero sostuvo que “seguramente en el futuro vamos a disfrutarlo y estaremos agradecidos”.

Informe técnico

El proyecto tenía dos dictámenes. En el “A”, se aconsejaba aprobar la iniciativa, con algunas modificaciones surgidas durante su análisis en las distintas comisiones de trabajo. En el “B”, en cambio, se planteaba solicitar previamente un informe técnico a la secretaría de Desarrollo Urbano de la Municipalidad.

Precisamente, durante el trabajo en comisiones, los concejales habían analizado la propuesta, junto a funcionarios del Ejecutivo. Por pedido de estos, se organizó un nuevo encuentro con el secretario de Minería de la Provincia, Ricardo Alonso, para consultarle respecto a la factibilidad del proyecto, desde el punto de vista del suelo. Sin embargo, los funcionarios municipales no asistieron a la reunión.

Al respecto, Benavides sostuvo que, una vez cumplido el plazo establecido para el análisis de la iniciativa, “desde el Concejo se decidió seguir impulsandolo” para que fuera tratado en la última sesión. No obstante, la concejala aclaró que durante todo este proceso “se cumplió con la labor legislativa y se fueron contemplando los pedidos realizados por el Ejecutivo”.