Premundial de básquetbol: ¿qué hay después de la Generación Dorada?

Premundial de básquetbol: ¿qué hay después de la Generación Dorada?
A un día del inicio del torneo que otorga cuatro plazas para el Mundial España 2014, canchallena.com te presenta a los jóvenes que sueñan con repetir las grandes hazañas
Cuando Manu Ginóbili, Luis Scola, Fabricio Oberto y Chapu Nocioni, entre otros, llevaron al básquetbol argentino a lo más alto del deporte olímpico, ellos eran sólo unos niños que corrían por los pasillos de los clubes, soñando algún día poder parecerse a sus ídolos. Pero el destino redobló la apuesta: los puso ante la difícil tarea de encabezar al grupo que reemplace a la Generación Dorada, la más exitosa de toda la historia argentina.

Podemos decir que representan a la década del '90. No, no es porque admiren la convertibilidad ni las privatizaciones, sino porque nacieron por aquellos años. De los 12 jugadores que a partir de mañana disputarán el Premundial de Caracas 2013, que otorga cuatro plazas para la Copa del Mundo España 2014, ellos son los más jóvenes. Pero a diferencia de lo que se puede presumir por este dato, sus roles no se centran en cubrir a los jugadores más experimentados para que puedan descansar algunos minutos, sino en ocupar puestos que hoy carecen de dueños y darles su propia impronta.

Nicolás Laprovíttola, Facundo Campazzo, Juan Manuel Fernández -bases-, Matías Bortolín -ala pivot- y Marcos Delía -pivot- son las apuestas del entrenador del seleccionado argentino de básquetbol, Julio Lamas, quien tomó las riendas del equipo luego del Mundial Turquía 2010 con el objetivo de liderar la transición. En tierras bolivarianas, los jóvenes deberán demostrarle al coach que no se equivocó, que son realidades.

Desde el 30 de agosto hasta el 11 de septiembre, la selección argentina de básquetbol disputará el Premundial de Caracas 2013, que otorga cuatro lugares para el Mundial España 2014. El equipo de Lamas ocupa el Grupo B junto a México, República Dominicana, Venezuela y Paraguay.

Luego de muchos años, la base del seleccionado deja de tener un dueño indiscutido. Pepe Sánchez y Alejandro Montecchia, en los primeros años, y Pablo Prigioni, en los últimos, fueron los cerebros de un equipo que, pese a las estrellas, siempre supo apoyarse en sus armadores. Ahora, Lamas vuelve a recurría a Laprovíttola y Campazzo, quienes pelearon hasta último momento por un lugar en los Juegos Olímpicos Londres 2012, y suma otra pieza: Juan Fernández, quien convenció al entrenador en la etapa preparatoria y ahora enfrenta su primer gran torneo en la selección argentina.

La dupla Campazzo-Laprovíttola supo congeniar muy bien en el Sudamericana de Chaco, donde la selección se consagró campeona al superar en la final al favorito Venezuela. Pese a ser muy jóvenes, sus rostros forman parte de la gráfica oficial del seleccionado, nada menos que junto a Luis Scola y Juan Gutiérrez. "Yo me sorprendí también cuando lo vi -le cuenta Laprovíttola a canchallena.com-. De a poco me voy sintiendo más cómodo, más parte del equipo. Este torneo es muy importante para mí y para mucho de mis compañeros. Hay que tomarlo así. Tengo que demostrar un montón de cosas".

"Hay muchos jugadores que no tenían un rol tan importante y este año lo van a tener. En cuanto a la base, tenemos que ser conscientes de que tenemos que conducir a la selección argentina. Yo me siento capacitado para hacerlo, y creo que Juan y Facu también están muy preparados para hacerlo", avisa el flamante base de Flamengo, que en la última Liga Nacional lideró a Lanús hasta la final.

"Facu vive en una Ferrari todo el tiempo. Le gusta manejarlo así de rápido y sabe hacerlo. Nico está en otro tipo de auto, de más lujo: un Mercedens Benz descapotable. No puede ir a los 200 km/h de Campazzo, pero es más vistoso. Puede transmitirle más tranquilidad al juego. Se complementan bien por eso", le dice Sergio Hernández, ex entrenador del conjunto nacional, a canchallena.com. "No sé si son amigos, pero hay logrado tener una comunión entre sí que eso es difícil de conseguir, una bendición que no se da en todos los equiposa. Si sumamos a Fernández, entre los tres le dan una frescura al equipo. Se está armando un plantel que va a estar muchos años en la selección", agrega.

El sorpresivo retiro de Fabricio Oberto, pese a que luego volvió para jugar el Preolímpico de Mar Plata, significó un golpe desde lo emotivo, pero sobre todo desde lo deportivo. "No hay más pivot", "Scola se va a tener que parar de cinco", "No tenemos más juego interno". Los reclamos y las incógnitas se multiplicaron en el mundo del básquetbol. Martín Leiva, más por su altura que por su juego, fue quien finalmente viajó a Londres. No había futuro, o sí. "Mirá a este chico Delía, se parece mucho a Fabri", me dijo un colega. Es un jugador en crecimiento, con mucho potencial y un físico aún en desarrollo.

"El torneo es muy importante. Es mi primera experiencia oficial con la mayor.. Estar con Luis (Scola) es increíble. Significa mucho estar acá", sostiene el pivot de Boca, quien todavía no tomó muchos minutos en la Liga Nacional y que reflejó mucho crecimiento en la etapa de preparación con el equipo. "Tenemos la presión que tendría cualquier jugador que está acá y tiene que clasificar al mundial. Si estamos y trabajamos bien, tenemos que estar mucho más tranquilos como equipo", analiza.

Hace algunos años, Julio Lamas ya trazaba el paralelismo entre Delía y Oberto: "Es el gran candidato a ocupar un puesto de pivote en el seleccionado mayor. Me ocupé de conocerlo y seguirlo en sus partidos de Liga. Tiene grandes condiciones, mucho potencial y lo más importante es que le gusta trabajar y progresar. Es muy aplicado. Puede ser el nuevo Fabricio Oberto. Para mí, se parece más a él que a Diego Ossela. Tendrá su oportunidad entre los mayores porque, además de su capacidad, es una necesidad del equipo".

El puesto de ala pivot cuenta con una estrella NBA, Luis Scola, y con un reemplazo de lujo, Pipa Gutiérrez. Pero en la gira por China y los partidos preparatorios para Caracas 2013, apareció un jugador que rápidamente ganó el reconocimiento: Matías Bortolín. Con 20 años y 2,06 metros de altura, le aporta al juego interno argentino una variante de confianza. También puede jugar de cinco. La temporada pasada apostó por la ignota liga de Austria, lo que le permitió jugar muchos minutos.

Los aires de juventud ilusionan con un recambio sin tanta pérdida. Ahora, el futuro del básquetbol argentino sólo puede decir: "Bienvenidos, los '90".

Nombre: Facundo Campazzo.

Puesto: base.

Altura: 1,79.

Nacimiento: 23/03/91.

Lugar: Córdoba

Club: Peñarol (Mar del Plata)

Reseña: hace de su explosión un estilo de juego. Sabe pasar la bola y lo hace con inteligencia, pero también puede anotar cuando el equipo lo necesita. Buena defensa, lo que molesta a sus rivales. Tiene la experiencia de haber jugado un Juego Olímpico.

Nombre: Nicolás Laprovíttola.

Puesto: base.

Altura: 1,85.

Nacimiento: 31/01/90.

Lugar: Morón (Buenos Aires).

Club: Flamengo (Brasil).

Reseña: es un jugador cerebral, de mucha técnica, pero algo irregular en los tiros. La temporada pasada demostró que puede liderar un equipo. Llega complicado con las lesiones.

Nombre: Juan Manuel Fernández.

Puesto: base.

Altura: 1,94.

Nacimiento: 22/07/90.

Lugar: Río Tercero (Córdoba).

Club: Dinamo Sassari (Lega, Italia).

Reseña: es el clásico base armador, inteligente, pero que también puede jugar de escolta. Su formación en el básquetbol norteamericano (cuatro años en Temple) le aportó determinación y decisión para tirar.

Nombre: Matías Bortolín.

Puesto: ala pivot.

Altura: 2,06.

Nacimiento: 11/04/93.

Lugar: Córdoba.

Club: Arkadia Lions (Austria).

Reseña: buena altura y brazos largos. Tiene de todo un poco: buena defensa, mucho tiro, buen posteo, aceptable rebotero y suma muchas tapas o complica mucho el tiro rival. Debe buscarse una liga más competitiva para seguir creciendo.

Nombre: Marcos Nicolás Delía

Puesto: pivot

Altura: 2,06

Nacimiento: 08/04/92

Lugar: Saladillo (Buenos Aires)

Club: Boca Juniors (Buenos Aires)

Reseña: creció físicamente y supo aprovechar el aprendizaje junto a formadores como Luis Scola. Excelente defendiendo, buenas piernas y aún cuando se enfrenta con rivales movedizos llega a tiempo a la marca y conserva la verticalidad. En ataque, se lo nota aplicado, con buena técnica, pero poco decidido. Con el físico que tienen, debería arrasar.

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