El trabajo lo inició el nuevo Sub Prefecto Gonzalo Farinon, quien con apoyatura de la Municipalidad de Baradero, buscarán de a poco erradicar el tránsito de vehículos dentro del Puerto, mayor control sobre el consumo de alcohol y tratar de erradicar las picadas.

 

El Sub Prefecto, Farinon se refirió a estos cambios que si bien son moderados ya están generando conciencia en la población:

“La idea del control en el puerto es darle a Baradero un puerto familiar, que se pueda disfrutar, venir con amigos, tomar mates, que se puedan distender, que la familia pueda venir con los chicos , jugar en los juegos que están en la Plaza o sea incentivar a que sea un puerto familiar.

Nosotros hemos notado que en el puerto tenemos algunos problemas de infraestructura con barreras que faltan en lo que es el puerto propiamente dicho que es muy antiguo y no ha tenido mantenimiento en el último tiempo, entonces van a ir notando algunos cambios que son medidas de seguridad que tarde o temprano las tenemos que empezar a tomar para no tener que lamentar una víctima por un accidente que pueda ocurrir allí.

 

El andar en moto, hablando por el celular o en estado de ebriedad en el puerto es doblemente peligroso, ya hacerlo en la calle es un peligro, pero hacerlo en el puerto no solo tenemos el peligro de que es un lugar chico donde hay mucha gente, sino que además ante cualquier accidente se corre el riesgo de caer al agua.

También hemos hablado con la Municipalidad porque hay muchos menores consumiendo bebidas alcohólicas y el municipio tomará medidas al respecto. Además la gente que no está en condiciones de manejar, o no tiene los vehículos en condiciones de ser conducidos que no lo hagan y tratar de esta manera disminuir los accidentes.

 

Me han dicho que hay chicos que juegan picadas, a mí no me consta porque lo que es calle Almirante Brown mi gente lo tiene controlado por eso no lo he visto. Pero es una zona donde hay muchas posibilidades de accidentes por lo que hemos decidido poner un poco mas de rigurosidad en cuanto a los controles para incentivar que la familia pueda disfrutar del puerto, venir a pescar tranquilos y no tengan que estar preocupados por los autos, las motos o la gente alcoholizada.

La idea es ir implementando de a poco estos cambios, no se pueden hacer bruscamente, y poder entre todos crear conciencia y un Baradero mejor, que es una ciudad familiar y si en mí estuviera la posibilidad de quedarme en un lugar toda la vida probablemente elegiría Baradero porque es una ciudad que me encanta desde el primer día que llegue acá. Hay algunas cositas que hay que ir puliendo y estamos trabajando para eso”.