Fue en la última sesión mientras se debatía un proyecto para declarar la emergencia territorial de los pueblos originarios, que trajo a escena el conflicto que el gobierno de Formosa mantiene con La Primavera conducida por Díaz, quien reclama la posesión de 600 hectáreas.

La disputa subió de tono en los últimos años, luego de que Díaz denunciara ser reprimido por la policía formoseña. Su crecimiento como dirigente no tiene límites y puso en jaque a Insfrán: le ganó una elección por el control de la colonia, consiguió un fallo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que obliga a la gendarmería a protegerlo, lideró innumerables marchas a la Casa Rosada y este año fue recibido por el papa Francisco.

Naidenoff recordó el reclamo de Díaz y reclamó un relevamiento del gobierno provincial. Mayans lo cruzó: “En la provincia de Formosa existen tres etnias: una es la toba, otra es la wichi y la tercera es la pilagá. No existe la comunidad Qom”, aseguró. “Qom quiere decir se hace, se nombra hacia los pueblos originarios”, insistió. “Estas comunidades tienen asignadas más de 3000 hectáreas con sus respectivos títulos. Uno de los pocos inconvenientes que existen es justamente en la comunidad toba la primavera son 600 hectáreas sobre 5 mil que tiene los toba en esa zona de la provincia. O sea que la problemática es mínima”, dijo.

Naidenoff explicó “Quiero aclararle al senador de mi provincia que el término toba es vocablo guaraní, que significa cara grande o frentudo. Por eso los propios pueblos, en función de su historia y su lenguaje ancestral, se denomina Qom”. “No te dejes llevar por el marketing”, le sugirió Mayans desde su banca.