En virtud de ello, el ministro Raúl Chico busca acordar la solución para poder financiar la campaña vitivinícola de este año. En ese sentido, comentó que “con el actual gobierno nacional, han cambiado los paradigmas, porque ellos no entienden lo que es producir en una zona desfavorable con todas las contingencias que hay acá, sobre todo en las zonas cordilleranas”, y comentó que en razón de esto, se está gestionado para conseguir apoyo nacional en beneficio de los pequeños productores viñateros.

Por otro lado, Vargiú dijo que ante los eventos climáticos ocurridos en distintas zonas del país, y que perjudicaron las plantaciones, “hubo mayor predisposición de Nación para con otras provincias que producen mayor volumen, como Mendoza y San Juan”. Sin embargo, indicó que “se está avanzando en ver de qué manera se logra la asistencia para la cosecha y acarreo de uva en las zonas afectadas”.

Sobre la cuestión, explicó que hoy “la uva no tiene precio porque ha subido el dólar, y en algunos mercados esto se reflejó en forma directa con incrementos de valores del producto. Entonces hoy, cualquier persona que compre o fije precio con el productor va a ser por debajo de los valores que tiene el producto final, para cuando el dólar se refleje en el valor del mosto o el vino”.

Como consecuencia, ahora la provincia está intermediando para que el pequeño productor no se vea afectado con estas coyunturas del mercado. La próxima semana se estaría definiendo en Catamarca un pequeño plan, para que el pequeño productor entregue la uva para elaboración de vinos. Entonces, según la calidad de uva entregada y del producto que se haya realizado con esa uva, se podrá establecer el valor propio de la producción primaria (la uva).

En el tema de la emergencia por los eventos climáticos, Vargiú adelantó que desde el ministerio de Producción se está planificando “llegar al productor con una ayuda integral”. En este orden, recordó que hay dos emergencias puntuales. Una es el caso de la localidad de Hualfín, donde, a consecuencia del granizo, los productores han perdido la totalidad de la cosecha, es decir, más de un millón y medio de kilos de uva de excelente calidad.

“Se está avanzando en ver de qué manera se logra la asistencia para la cosecha y acarreo de uva en las zonas afectadas”, explicaron desde el ministerio de Producción.