En diálogo con REALPOLITIK, Klein señaló que esperan que “se haga un buen sumario, que se descubra qué pasó, por qué motivo los menores están golpeados, y que estos compañeros paguen lo que tiene que pagar. Porque por culpa de estos inoperantes estamos ensuciando a todos los trabajadores de Minoridad”.

A continuación, la entrevista completa.

RP.- ¿Qué pasó en el instituto de menores Almafuerte?

En realidad creemos que allí tuvieron mucho que ver los asistentes de Minoridad. Nosotros siempre defendimos a los compañeros cuando ocurrieron motines, pero ahora en este caso nos encontramos con que los menores están golpeados.

Uno se da cuenta de que algo ocurre cuando estos trabajadores por propia decisión deciden hacer la denuncia en la comisaría. No la hace el director del instituto, que es el máximo responsable de ese lugar. O sea que no se llamó al director, ni a los funcionarios.

En la revuelta -si es como dicen que los menores atacaron a los celadores-, directamente se tiene que hacer cargo el directivo y comunicarles a las autoridades del área lo que pasó. Acá hubo una golpiza salvaje de los trabajadores hacia los menores. Hay chicos que están muy golpeados.

RP.- ¿Qué evaluación hace del rol que ejerció en este caso el estado, más precisamente la secretaría de Niñez y Adolescencia?

Es lamentable, como todo. Si esto ocurre es porque hay un estado que está totalmente ausente. No hay comida en los institutos. Todo cambió hace cuatro años atrás. Esto era algo serio, si no había comida en los institutos de menores se armaban motines importantes. Aún no sabemos en este caso qué fue lo que derivó en la discusión, pero lo cierto es que están haciendo falta alimentos en los centros, y eso es gravísimo.

Según los medios de comunicación, se dice que entraron en una discusión los maestros con los menores. Si esto es realmente así, te digo que es una vergüenza, jamás un mayor en estas circunstancias puede discutir con un menor. Los asistentes de Minoridad no deben ponerse a la altura de los chicos.

Tenemos que proteger a los chicos y el maltrato verbal hacia los jóvenes es una realidad en todos los institutos de menores, y eso es terrible.

RP.- Se habla de la erradicación de las patrullas juveniles, ¿qué opinión le merece esta decisión?

Siempre lo dije, estas patrullas no sirven para nada. Al igual que el programa Envión, que dijimos que era un cuento chino. Bueno, el tiempo nos dio la razón, ahora le deben plata a la gente que estuvo con ese programa.

Nosotros hemos trabajado mucho tiempo en Menores, y sabemos cómo es todo. Se hacen programas con fines políticos y ninguno ataca la problemática de fondo. El intendente Bruera hace programas con la Universidad, ¿qué carajo van hacer los estudiantes con los pibes?. El tener estudios de trabajador social no garantiza la solución de este problema.

Primero no tenemos donde meter a los chicos, por más que salgan cincuenta profesionales a la calle, ¿qué van a resolver?, es sólo un parche. Mientras tanto, Scioli y Bruera miran para otro lado.

RP.- ¿Qué va a pasar con esta gente que le pegó a los chicos en el instituto Almafuerte?

Les iniciaron sumario a todos, pero eso sirve sólo para deslindar responsabilidades. Hubo una época en que los trabajadores de Menores estábamos todos sumariados, porque cuando hay una fuga entraba el sumario para deslindar responsabilidades y averiguar quién tuvo la culpa y quién no.

Esperemos que acá se haga un buen sumario, que se descubra qué pasó, por qué motivo los menores están golpeados, y que estos compañeros paguen lo que tiene que pagar, porque por culpa de estos inoperantes estamos ensuciando a todos los trabajadores de Menores que siempre fuimos tomados como torturadores.

Tenemos que tratar de sacar a esos chicos de la situación en la que están, demostrarles que existen otros modos de vida y acompañarlos.

Estamos hablando de las personas que tienen que contener a los chicos, que los tienen que cuidar, y esas mismas personas les pegan. A esto sumémosle el silencio total del estado. La verdad es que si esto no se soluciona, Menores tiende a desaparecer.