Con el lema a nivel nacional “la mayoría celeste”, una caravana de dos cuadras de automóviles, bicicletas y motos recorrieron las calles de la ciudad en Villa María y Villa Nueva. De la movilización participaron jóvenes, familias y miembros de las diferentes iglesias.

En este sentido, el integrante de Jóvenes por la Vida Andrés Ontibero comentó que la organización de esta convocatoria en diferentes puntos del país se debe a “el tratamiento exprés que se le pretende dar a la ley del aborto”.

Además, mencionó que la mayoría de la población está en contra de este proyecto, por lo que “la composición parlamentaria no es representativa”.

“Se pretende un tratamiento muy rápido, lo que creemos que no es sano y no da lugar a que se escuchen más voces como sí pasó en el 2018”, agregó.

Movilización

La convocatoria fue amplia, con gran cantidad de automóviles que a las 17 estaban en la plaza Centenario con sus carteles celestes y sus pañuelos. Antes de la media hora, compartieron una oración y comenzaron a recorrer las calles villamarienses para culminar en la plaza de los Andes en Villa Nueva.

Desde el punto de inicio, fueron por la Santa Fe hasta la terminal por el bulevar España. Allí tomaron el Sarmiento hasta la avenida costanera y cruzar por el puente Andino para la vecina ciudad.

Sobre la iniciativa, Ontibero comentó que siempre tratan de hacer este tipo de eventos entre varios movimientos y que si bien todos participaron colaborando, en este año surgió de un grupo de pastores evangélicos.

“La consigna es clara. Defender los derechos de niños por nacer, como dice el lema”, sostuvo Andrés y en torno al proyecto por la interrupción voluntaria del embarazo, declaró: “Es un retroceso en este derecho. El código civil es muy claro, es del año 2015 no es viejo, dice que la vida humana empieza en la concepción”.

Respecto al lema que los convocó a nivel nacional, explicó que la mayoría de las encuestas realizadas por los medios de comunicación dieron como resultado que la mayoría de la población desaprueba el aborto, de allí el lema.

Además, sostuvo que otro de los pilares fundantes de esta movilización fueron los tiempos legislativos para tratar el proyecto. “Entró la semana pasada y se va a tratar en estos días con la intención de votarse próxima”.

Ante la posibilidad de que la iniciativa ejecutiva consiga los votos necesarios para implementarse, afirmó: “Esperamos que esto no se apruebe, saldremos las veces que hagan falta y si llega a salir, no perdemos la esperanza y la lucha no termina”.

Jóvenes por la Vida

El entrevistado detalló que nació en el 2013. “Desde nuestra edad, el secundario y de la universidad, también veíamos más la parte de concientizar, de hacer charlas, formaciones en las escuelas y preparar marchas”, detalló.

Sobre esto mencionó que este año lo hicieron mediante sus plataformas sociales, entrevistando a especialistas e integrantes del movimiento provida.

Respecto al accionar como juventud, aseveró: “Lo que nos mueve es un claro reconocimiento de los derechos, este derecho que existe, que es esencial como es el derecho a la vida”.

En consecuente, atribuyó que una de las problemáticas es la regulación de los derechos humanos, que son reconocidos por el Estado, pero que realizan interpretaciones arbitrarias.

“Para nosotros es una cuestión de reconocimiento de derechos, no el retroceso, la vida es el derecho fundamental y por eso lo vemos desde ese lado”, alegó.

Fundamentos

El joven, de 23 años, manifestó: “Es cierto que existen los abortos, no estamos diciendo eso, pero el Estado no está acompañando esto”.

En este sentido, subrayó que antes de legalizar el aborto debería existir un Estado presente. “Cuando a las mujeres son acompañadas, ellas mismas deciden ir marcha atrás con la intención de abortar, ellas eligen no hacerlo”, dijo.

“En Villa María hay algunos grupos que ayudan a las mujeres, pero es cierto que es muy poco lo que se puede hacer, porque desde el Estado se podría hacer mucho más pero no se hace”, ratificó.

En torno al lema feminista “Mi cuerpo, mi decisión”, Ontibero expuso: “Desde un punto de vista teórico, el debate es muy claro, la persona tiene derecho sobre su propio cuerpo pero no por el ajeno”.

En este sentido, aclaró: “Ahí es una discusión o vemos que muchas veces es poco serio, porque no se reconoce el cuerpo del bebé. No hay una postura muy clara en las legislaciones de todo el mundo sobre el inicio de la vida humana, entonces, ¿cuándo su cuerpo y cuándo deja de ser el tuyo?”.