Juego de la sillas en la Municipalidad

Juego de la sillas en la Municipalidad
Mestre pidió la renuncia a todo su equipo. Hará varios enroques y apartará a acusados de hechos de corrupción. Jurarán el lunes.

La peor crisis del intendente Ramón Mestre derivó ayer en el pedido de su parte para que todos los miembros de su gabinete presenten la renuncia, jaqueado por las denuncias de dádivas y casos de corrupción. El lunes a la mañana, el radical tomará juramento al nuevo equipo. Día en que se develará quiénes ganan en el juego de la silla en el poder municipal. Fuentes cercanas al intendente adelantaron que muchos enrocarán secretarías y otros saldrán de juego, entre estos los nombrados “amigos” del jefe del Gobierno local cuestionados.

Quedarán afuera el secretario de Gobierno, Facundo Cortes Olmedo, denunciado en el programa televisivo ADN de tener con su cuñado, Matías González Palau, la concesión de los plastificados de los carnés en los CPC. El radical ya retiró ayer a la mañana sus cosas del Palacio 6 de Julio y le avisó a sus colaboradores que no firmaba más expedientes.

Saldrán por la misma puerta el secretario de Finanzas, Sergio Torres, también acusado de tener una empresa de limpieza en los CPC, llamada Colibrí, junto con la directora de Gestión Patrimonial, Sabrina Briggiler, y su familia. También será una baja el secretario Privado de Mestre, Juan Pablo Ostanelli, hasta aquí un “intocable” de Mestre, tal como lo apodan en la misma UCR. Es uno de los hombres más resistidos en el partido por formar parte del círculo íntimo del jefe de Gobierno y por no tener militancia partidaria.

El resto de las dimisiones estaban hasta anoche en suspenso, cuando todavía Mestre seguía llamando a viejos dirigentes y funcionarios de Ramón Mestre (padre) y de Rubén Martí para tentarlos. El único con cargo asegurado es el secretario General, Alberto Giménez. La versión oficial de la Municipalidad fue: “Porque quedará a cargo de las cuestiones administrativas durante el fin de semana que sean necesarias, no por otra razón”. La otra explicación es que Mestre no tocará al ex intendente de Mina Clavero porque es el presidente del Comité Provincia de la UCR, y sacarlo sería una deshonra.

Sí se conoció que Giménez podría ser reubicado en lo que queda del año y medio de gestión. Sobre todo, tendría nuevas funciones con la llegada –casi asegurada por los mismos radicales– de Eduardo Capdevila, quien fue ministro de Gobierno y Seguridad de Eduardo Angeloz y senador provincial. Capdevila tiene una estrecha relación con Diego Frossasco, uno de los asesores letrados de la Municipalidad, que tampoco sería removido.

Respecto del secretario de Desarrollo Urbano, Mariano de Juan; y de Transporte, Juan Pablo Díaz Cardeilhac, nada hay confirmado desde el municipio. No se dieron precisiones sobre si serán sostenidos (o no) por el intendente. “Los que se van no es por las denuncias televisivas, sino por cosas que Ramón ya no estaba de acuerdo”, intentaron aclarar desde el círculo de Mestre.

En sectores del radicalismo aplaudieron en la intimidad la salida “de los amigos”. “Si queremos hacer un cambio generacional en serio tenía que sacar a estos tipos que están salpicados. Así como la gente mira avenida Brasil, nosotros no nos perdíamos ADN para ver quién tenía un quiosco, y así no se podía gestionar”, se sinceró un mestrista. El presidente del bloque de ediles de la UCR, Javier Bee Sellares, fue el único dirigente que salió a los medios a anticipar lo que más tarde haría Mestre. “Creo que lo que corresponde es apartarse”, sugirió. Aunque sonaba para el Ejecutivo, fuentes del Palacio 6 de Julio aseguraron que el intendente le pediría que siga en la bancada. Las próximas horas serán decisivas.

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