Unos 15 mil neuquinos de 18 a 24 años pertenecen a la generación “ni-ni”, es decir que no estudian ni trabajan. Representan el 23,5% de la población de esa franja etaria y la mayoría vive en el oeste de la capital provincial. Así lo informó el secretario de Economía Social de la Nación, Carlos Viveros.

También anunció que, la próxima semana, la gerencia local de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) convocará a municipios y organismos sociales para incluir a esos jóvenes sin educación ni empleo en el nuevo programa nacional Progresar, que contempla un subsidio de 600 pesos para quienes retomen sus estudios.

Viveros recordó que hay más de 1,5 millones de jóvenes “ni-ni” en el país, que representan un 25% del total de personas de entre 18 y 24 años. Agregó que en esta provincia esa proporción “está un poquito más abajo, en el 23,5%”, lo que implica alrededor de 15 mil neuquinos.

Observó que, en el país, las zonas con mayor proporción de desocupación juvenil son el noreste y noroeste, “o sea las provincias que históricamente tienen mayor situación de pobreza o aislamiento, que están por encima del 30%”.

A nivel provincial, en cambio, no hay aún un análisis detallado sobre las regiones que concentran mayor porcentaje de jóvenes sin ocupación. Sin embargo, Viveros estimó que “el oeste de la ciudad está muy abandonado y seguramente ahí es donde vamos a encontrar a la mayor cantidad de destinatarios de este programa”.

Señaló que en ese sector es donde “está la mayor situación de conflicto social, la mayor situación de problemática habitacional y también el mayor abandono en la política de obra pública e infraestructura”.

Convocatoria

Indicó que, a partir del lanzamiento del Progresar, “el primer desafío es acercar la comunicación a cada uno de los rincones de Neuquén, para lo cual, la jefa regional de Anses va a estar convocando la próxima semana a los municipios y organizaciones”.

Añadió que también buscarán aprovechar “los meses de verano en la zona cordillerana para llegar a las comunidades indígenas o rurales” e invitarlos a inscribirse en el programa.

El Progresar está destinado a jóvenes sin escolarización y sin trabajo formal o con un empleo donde el salario esté por debajo de la mínima. Para recibir el subsidio, tampoco deben tener ingresos superiores al piso salarial quienes integran su grupo familiar.