Ingenieros agrónomos opinan que sin control no sirve prohibir el glifosato

Ingenieros agrónomos opinan que sin control no sirve prohibir el glifosato

Se reunieron con concejales de todos los bloques por el anteproyecto de ley para la prohibición y acopio del agrotóxico en Gualeguaychú. Afirmaron que si no se controla lo que se hace fuera del ejido, poco cambiarán los efectos contra la salud.

 

Ayer por la mañana, en la Municipalidad, representantes del Colegio de Ingenieros Agrónomos se reunieron con concejales oficialistas y opositores para debatir y hablar sobre el proyecto de ley que busca prohibir el uso, el acopio y la comercialización del glifosato en todo el ejido de Gualeguaychú

La sesión en conjuntas,  donde se trataron tanto el proyecto de prohibición como el que propone crear un régimen de regulación para la aplicación de agroquímicos, se extendió por una hora y media, y fue calificada como positiva por casi todos los presentes, aunque también remarcaron que hay que poner mucho énfasis y mayor atención en los controles.

“La participación del Colegio de Ingenieros Agrónomos nos permitió acceder a una mayor información del uso de este tipo de productos, y el debate ahora pasa por el rol que debe tener un gobierno local en esta temática”, afirmó ante ElDía el concejal por el Frente Para la Victoria (FpV) Pablo Delmonte quien además remarcó que “los datos recabados hasta el momento confirman la necesidad de contar con gobiernos locales presentes y con fuerza de decisión en este tipo de práctica”.

 

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Otro que calificó de positiva la reunión fue Daniel Berón, del bloque Cambiemos, quien además sostuvo que el tema requiere un profundo debate: “Tenemos un modelo productivo que tiene más de veinte años, y una repercusión en el mercado económico muy importante en todos los ámbitos”, subrayó a ElDía antes de señalar: “La ordenanza es importante, sobre todo a lo que refiera a venta y comercialización, pero de nada servirá si una vez que se vayan fuera del ejido todo sea un descontrol”.

Los controles necesarios

Emanuel Bogliacino, uno de los responsables del Colegio de Ingenieros Agrónomos de Gualeguaychú presentes en el encuentro, habló sobre la importancia de los controles y del rol del gobierno provincial para ejercer los mismos: “El que tiene el poder de policía es la Gobernación, mientras que el municipio tiene ese mismo poder dentro del ejido”.

En cuanto a la prohibición que contempla el anteproyecto, Bogliacino la describió como demasiada dura y al mismo tiempo consideró que la misma no sería la solución: “Salimos del ejido y a 150 metros te van a vender el producto. Considero mucho más fundamental poner el énfasis en el control”.

“Controlar no solo chequear con qué se carga la máquina, también implica ver las condiciones meteorológicas en el momento de la aplicación, fundamentalmente para que estos productos no provoquen daño al medio ambiente, no contaminen cursos de agua o lo pulverizado vaya en dirección a una escuela o un centro urbano. Los municipios tienen competencia para hacerlo, pero para eso hay que contratar personal capacitado y contar con la infraestructura  necesaria”, señaló por su parte la ingeniera agrónoma Gabriela Zermatten, quien ha trabajado asesorando a municipios, entre ellos el de Caseros, departamento de Concepción del Uruguay, donde se aprobó una  ordenanza  que regula todo lo que es el control de agroquímicos.

“El Ejecutivo Municipal de Gualeguaychú trabaja pensando en la salud de la población y del medio  ambiente. Pero si va a prohibir el uso, el almacenamiento y la comercialización, que además salga a controlar como corresponde”, concluyó Zermatten.

“Se trata de un tema complejo y sensible, y que se debe tener mucho cuidado por lo que significa la economía y el mercado”, anticipó el concejal Berón antes de agregar: “Más que nada por la coparticipación de la soja, ya que  hace años que los programas de vivienda, salud y todo lo demás se viene haciendo con fondos provenientes de la oleaginosa”.

“Entre todos los actores se puede arribar a un principio de solución, y por esa razón es importante reunirse con gente especializada en el tema, tales como profesionales del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), del Servicio Nacional de Sanidad Animal (Senasa) o del Consejo Nacional de Investigaciones científicas y técnicas (Conicet)”, solicitó Berón, de Cambiemos.

“Hay un estado de situación respecto a las evidencias científicas sobre el glifosato y su vinculación con varias enfermedades, entre ellos el cáncer. Por la cantidad y contundencia de evidencias científicas, desde nuestro bloque entendemos que se justifica una prohibición del producto”, sostuvo por su parte Delmonte, del FpV.

Luego de los ingenieros agrónomos, los concejales se reunirán con representantes de las entidades agropecuarias y durante la semana harán lo mismo con representantes de grupos ambientalistas y ecológicos.

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