El candidato a senador por Compromiso Cívico Neuquino, Marcelo Inaudi, cerró ayer las actividades de campaña para las elecciones del domingo con una caminata por el centro de la ciudad de Neuquén y fuertes críticas al postulante del Frente para la Victoria (FpV), Marcelo Fuentes.

Junto a un centenar de militantes y simpatizantes de la capital, y al candidato a diputado, Rubén Etcheverry, el postulante al Senado de la Nación aprovechó el último día de campaña para contactarse con los vecinos y dar a conocer su propuesta, oportunidad en la que dejó en claro que su sector accederá a una de las tres bancas que se ponen en juego.

“Vamos a llegar al Congreso para terminar con el centralismo y autoritarismo del gobierno nacional”, expresó Inaudi, quien agregó que “los neuquinos necesitamos que nos representen, algo que hasta el momento no viene ocurriendo”.

El actual funcionario municipal de Horacio Quiroga explicó que una vez que acceda al Congreso impulsará un gran consenso entre todas las provincias, para cambiar los porcentajes de los recursos que hoy se coparticipan y que en su gran mayoría quedan en manos del gobierno nacional.

“No podemos permitir que los gobernadores sigan arrodillándose ante los funcionarios nacionales para gestionar obras para sus provincias. Tenemos que terminar con este modelo unitario y centralista, que tanto daño nos hizo a los argentinos”, aseguró.

Además, sostuvo que si el kirchnerismo pierde la mayoría en el Congreso, no tendrá otra opción que dialogar con la oposición, “algo que detesta”.

“Queremos terminar con esa mayoría y en eso es clave el voto del domingo en la provincia de Neuquén”, subrayó Inaudi, para luego acotar que “los candidatos con opciones a ganar una banca somos Guillermo Pereyra, Marcelo Fuentes y yo. Por eso les pido que me acompañen”.

Etchverry y Quiroga estuvieron el miércoles en Plaza Huincul, donde reafirmaron que defenderán los intereses de "los neuquinos y no los de un gobernador o una presidenta".

“Nos encontramos con un panfleto electoral que decía que Chihuido generó 5 mil puestos de trabajo cuando, en realidad, es un proyecto que se viene postergando hace años y no hay ningún trabajador neuquino ahí”.