Fue así que comenzamos a andar los caminos de toda la provincia sin dejar de visitar ni un solo pueblo, ni un solo paraje, ni una sola colonia, llegando a lugares donde hacia tiempo la UCR no llegaba!.

En el trayecto hicimos buenos amigos, acercamos antiguos dirigentes que estaban casi olvidados! nuevos dirigentes y por sobré todo sumamos gente comprometida para iniciar un cambio, cambio que diera su primer paso el 11 de agosto y que seguramente y sin temor a equivocarme dará su segundo pasó el 27 de octubre abriendo camino para llegar al 2015 donde tendremos como meta hacer la FORMOSA que todos soñamos.

En estos casi dos años a lo largo y ancho de la provincia encontraba carteles o escuchaba hablar a nuestro gobernador del HOMBRE NUEVO FORMOSEÑO, a cada rincón donde llegaba preguntaba a los lugareños si conocían al H.N.F y grande era mi sorpresa porque nadie lo había visto, hasta que de tanto andar me di cuenta que el famoso H.N.F no era otro que: aquel que tenía "hambre de agua", aquel que debía hacer largas colas para tratar de conseguir una garrafa para llevar a su casa, aquel que al llegar enfermo al hospital se encontraba con que no había un médico, y que si tenía la suerte de encontrar uno, seguramente no tenía los remedios que necesitaba ni el dinero para poder cómpralo.

El H.N.F. era aquel que no podía llegar a fin de mes por lo bajó de su salario y debido a la inflación existente, cada fin de mes se le hace más largó, este H.N.F el único sueño que tiene hoy... es ¿que va a comer mañana?..... este H.N.F no es él que quiero para mi provincia!!!.

Deseó un formoseño que tenga un trabajo digno, con un sueldo que le permita mantener a su familia, que llegue a un hospital y encuentre un médico y (que este médico también tenga un salario digno) y que el estado le suministré los remedios y le facilité lo que este a su alcance para que a su salud no le falté nada, que conseguir una garrafa no le resulté una odisea, que al llegar a su casa y abrir la canilla sea natural que salga agua, que llegar a fin de mes no sea un sufrimiento, llegando al 2015, que el único hambre que tengamos sea el "hambre de gloria" y así poder gritar a los cuatro vientos que al fin encontramos al HOMBRE NUEVO FORMOSEÑO.