Esta mañana, el sacerdote Gustavo Aguilera informó desde Filipinas que restaban hallar tres argentinos de la comunidad de cien que se permanecían en el país en el momento en que llegó el tifón Haiyan. Más tarde, sin embargo, desde la Cancillería argentina informaron que todos los compatriotas que se encontraban en ese país fueron hallados sanos y salvos.

"Según la embajada hay unos cien argentinos aquí. La mayoría somos religiosos", relató más temprano el sacerdote Gustavo Aguilera desde Filipinas, donde este fin de semana el tifón Haiyan dejó más de diez mil fallecidos.

Al ser consultado respecto al número de personas que murieron por el hecho, Aguilera aclaró que "el número de diez mil víctimas es una estimación". "Hay muchas casas inundadas. En La Plata tuvieron hace poco una inundación, recién cuando bajan las aguas los cuerpos comienzan a flotar", recordó.

"Yo estoy en Cebú City, capital de la isla de Cebú. La zona más afectada es la de la isla de Leite, a cien km de aquí", detalló el sacerdote que pertenece a la orden de los misioneros del Verbo Divino. "Hace cinco años que estoy en Filipinas, pero soy de Avellaneda", puntualizó.

Por último, Aguilera explicó que la catástrofe fue tan grande por una sumatoria de distintos factores: "El tifón lamentablemente es algo que suele pasar aquí en esta parte del mundo. Lo que pasa es que esta vez fue de escala cuatro, con ráfagas de viento de 300 km por hora. Hace dos semanas sufrimos un terremoto, entonces los sistemas de evacuación no dan abasto".