La cifra de muertos causados por el tifón aumentó a 3.621, informó el vocero de la agencia de defensa civil del país, el mayor Reynaldo Balido, después que Naciones Unidas emitiera reportes contradictorios sobre cuántas personas habían muerto.

Pero en Tacloban las autoridades entregaron otro informe en donde se hablaba de 3.422 personas muertas en las islas de Samar y Leyte, las dos áreas más afectadas.

Previamente en una rueda de prensa realizada este jueves en la sede de la ONU, el vocero adjunto Farhan Haq indicó que el más reciente conteo arrojaba una cifra de 4.460 muertos y que la información procedía de funcionarios en las Filipinas.

Algunas autoridades calculan que la cifra final, cuando los desaparecidos sean declarados muertos y se llegue hasta las regiones más alejadas, será de más de 10.000. Por lo menos, 600.000 personas están desplazadas.

La ayuda humanitaria

El Gobierno también defendió este viernes sus esfuerzos para entregar asistencia a las víctimas del tifón Haiyan, muchas de las cuales han recibido poca o ninguna ayuda desde que el monstruoso evento meteorológico golpeó el país hace una semana.

"En una situación como esta, nada es lo suficientemente rápido", dijo el secretario del Interior Mar Roxas desde la ciudad de Tacloban, que prácticamente quedó destruida por la tormenta. "La necesidad es enorme, es inmediata, no se puede llegar a todos".

Dada la dimensión del desastre, y los problemas de infraestructura y telecomunicaciones, esto no es inusual.

Las autoridades tienen dificultades para satisfacer las necesidades inmediatas. Esto ocurre frecuentemente después de que hay desastres de gran tamaño, en especial en países pobres donde los gobiernos local y estatal carecen de capacidad.

La velocidad de los esfuerzos de ayuda se ha incrementado en las últimas 24 horas, de acuerdo con reporteros que han estado en la región varios días. Gobiernos extranjeros están enviando comida, agua y suministros médicos, así como personal capacitado a la región. También están llegando camiones y generadores.