La sede de la Junta de Gobierno del Movimiento Popular Neuquino (MPN), sobre la calle Olascoaga, fue el primer punto de encuentro de los festejos del partido provincial. Allí, el flamante gobernador electo de Neuquén, Omar Gutiérrez, llegó cerca de las 22:30, aunque tardó más de media hora en arribar al auditorio de esa sede en la que se realizó la conferencia de prensa, acompañado por su compañero de fórmula Rolando Figueroa, el gobernador Jorge Sapag, el petrolero Guillermo Pereyra, los legisladores electos Pablo Bongiovanni y Alma “Chani” Sapag, además de dirigentes históricos, como Pedro Salvatori.

La nota de color la dio Elías “Gringo” Sapag, quien llegó primero al lugar, con su clásico sombrero transformado en cábala. Fue uno de los que arengó a los militantes para la entonación de cánticos, los que estuvieron dirigidos, en su mayoría, al intendente de Neuquén, Horacio “Pechi” Quiroga.

Ante la requisitoria periodística y como fue costumbre durante su campaña, Gutiérrez evitó dar definiciones hacia el futuro y se limitó a agradecer a la militancia, “al pueblo” de la provincia y “a todas las corrientes del MPN” que acompañaron la propuesta del oficialismo.

“No nos sorprende la cantidad de votos, era lo que esperábamos y percibíamos en la calle”, dijo.

Destacó los resultados del MPN en las localidades donde seguirá como gobierno, y la recuperación de otras, como Junín de los Andes.

“Vamos por mucho más y para seguir trabajando por el destino y porvenir de los neuquinos”, sostuvo Gutiérrez, y apuntó que “no hay mejor encuesta” que el resultado del escrutinio final.

Destacó que el resultado es “una demostración de la vigencia” y de la “unidad” que tiene este partido provincial, “con 53 años de vida”, lo que, a su entender, le permitió enfrentar con éxito el desafío electoral que se le presentó ayer.

Gutiérrez no quiso dar precisiones respecto de la conformación de un futuro gabinete, como tampoco de lo que será el proceso de transición hasta diciembre. “Toda nuestra energía estuvo centrada en lo de hoy (por ayer) y si el gobernador me lo permite mañana (por hoy), me reintegro al Ministerio de Economía”.

Ante su frase, Sapag, sentado junto a él, bromeó al afirmar que el actual funcionario y futuro gobernador “está confirmado en el cargo”.

La misma actitud tomó cuando se lo consultó sobre cómo será su relación con el gobierno nacional. Sólo se limitó a decir: “En ocho años, Ana Pechen y Jorge Sapag han tenido un camino de coherencia que ha permitido defender los intereses de todo el pueblo neuquino”.

La celebración del partido provincial se extendió durante la medianoche en un acto frente a la Casa de Gobierno, donde los militantes y algunos dirigentes, como la diputada electa Gloria Sifuentes, volvieron a cargar contra Pechi Quiroga, quien fue durante toda la jornada el principal destinatario de las dedicatorias del triunfo emepenista.