RIVER: Tras meterse a la hinchada en el bolsillo, reivindica su físico. Y cree que sólo le falta masa muscular.
¿Estás disfrutando de todo esto o todavía no?
Justo sobre eso estaba hablando con un par de amigos. Ellos me decían que lo que me pasa es tremendo, pero yo todavía no caí. Tengo que aprender a disfrutar de los buenos momentos, porque en el fútbol a veces abundan los otros. Yo estoy cumpliendo mi sueño de jugar en River. Con eso ya estaba bien y, encima, se me están dando las cosas, así que esto que me pasa es hermoso. No tengo palabras para agradecer los gestos de los hinchas y el reconocimiento de mis compañeros.
¿Entendés tanto cariño?
La verdad es que es muy loco lo que me pasa con la gente. Yo no hice nada todavía como para merecer todo ésto. Si jugué poco... Pero estoy contento porque me siento importante. Estoy ayudando al equipo y eso me gusta. Y creo que River está encontrando la mística que necesita. Sabemos que acá hay con qué.
¿Te sentís molesto si te dicen "gordo"?
Ja, nada que ver. Que me digan gordo me agranda. Ponelo, eh. Ponelo. Yo entro a la cancha y hago lo que siempre hice desde las Inferiores. También lo hacía en el baby fútbol. Mi manera de jugar es por eso. Mirá, es diferente que le vayan a pegar a Buonanotte que a mí. Hay una diferencia muy grande. Y cuando ellos vienen más fuerte conmigo, más se lastiman, je. Yo no me pongo duro, ahí está la diferencia y ellos se golpean a sí mismos. El roce me gusta, me agranda.
En Central te trataron bien primero, pero después te insultaron lindo. ¿Te embroma eso?
¿Central? Esos no existen. Yo no soy amigo de ellos. A la gente de Newell's le pedí perdón por cómo se dio todo. Pero ellos tienen que entender que lo mío era jugar en River. Este fin de semana fue completo porque Newell's le ganó a Boca y nosotros a Central. Es un momento para disfrutar. Yo con Newell's no había podido marcarle un gol a Central en el clásico. Por suerte ahora pude y se lo dediqué a mis ex compañeros y a los hinchas.
Pero vos sabes, por más que te agrande, que todos te cargan con mala onda con lo de "gordo"...
Yo no le presto atención a eso. Estoy bien y, si es por mí, juego así todo el campeonato. Si Gorosito considera que tengo que bajar, bajo. Porque, por ahí, un par de kilos menos me vienen bien. Pero yo necesito recuperar masa muscular. Lo que pasa --y mira con complicidad-- es que estuve muy ansioso todo este tiempo. Fue casi un mes de negociaciones...
¿Ya te transformó River?
Noooo. Nada que ver. River es diferente a todos, pero la verdad es que a mi forma de ser no me la va a cambiar nadie. Este club es único. Acá tenés todo. Tres remeras para entrenar, zapatillas, botines, están todos en todos los detalles. Son cosas pequeñas que cambian el día a día. Hasta en las Inferiores es diferente, aunque en eso se parece a Lanús. Porque allá también se respeta mucho a los chicos. Yo te digo que acá en River los pibes de las Inferiores ya llegan con un estilo propio y diferente. Un "estilo River" que se palpa en el juego.
¿Te molestó que la AFA no te dejara jugar con la camiseta 99?
No, todo bien. Con la 23 salí campeón en Rumania. Es un buen augurio. Lo de la 99 era por mi ídolo como centrodelantero que es Ronaldo. Pero capaz que con la 23 se da lo mismo que en Rumania y festejo el título como allá. Si es así, no me sacó más ese número.
Ya metiste el primer gol con la camiseta de River, ¿qué te pasó por la cabeza?
No reaccioné. Corrí. Pensé en mi hija. En todo lo que me costó llegar a mi club y en que por fin podía gritar un gol mío con la camiseta que tantas veces alenté en la popular. No es poco, ¿no?
Comentá la nota