Desde esta semana estacionar en el centro sanrafaelino cuesta más caro, ya que aumentó el precio de las tarjetas de estacionamiento medido, de 3,50 a 4,50 pesos la hora.

Ayer, algunos de los usuarios habituales se encontraron con la novedad del aumento y manifestaron su descontento. Sin embargo, los mismos quiosqueros que venden las tarjetas, comentaron que "la gente las compra sin decir nada".

El sistema de estacionamiento controlado rige en el área céntrica de acuerdo a diferentes sectores. En gran parte hay que colocar la tarjeta al estacionar de lunes a viernes de 8 a 13 y de 15.30 a 20.30, y los sábados de 8 a 13, por un lapso de dos horas. En el resto, es de lunes a viernes de 8 a 13, y son controladas por un grupo de inspectores pertenecientes a la comuna.

Además, se implementó un nuevo diseño de las tarjetas de estacionamiento, con las que se busca facilitar al usuario el completarlas.

Así lo explicó el director de Estacionamiento Controlado, Oscar Fregenal, quien contó que el nuevo diseño hace que al ser sencillo sea más entendible, como también que se cambió el color de las mismas con el mismo objetivo, ya que ahora son doradas con fondo blanco, y con el escudo de la Municipalidad de San Rafael en tinta metalizada.

Sin embargo, las tarjetas que se utilizaban hasta ahora, de color violeta, permanecerán en vigencia hasta el 31 de diciembre de 2015, tal como versa la leyenda que poseen.

"No hay mucha diferencia y aunque la Municipalidad va a recaudar más va a seguir siendo un problema estacionar en el centro", se quejó Alejandro (53), quien explicó que trabaja en la zona y le resulta muy difícil conseguir donde dejar su vehículo.

Pero el precio y el color no fueron las únicas variaciones, ya que para este año aumentó el valor de las multas por no colocar tarjeta, o que se venza el tiempo o adulterar las mismas.

Así la multa de costar 310 pesos pasó a 400 pesos, continuando vigente la modalidad de poder presentarse dentro de los diez días hábiles hacer un pago voluntario por el valor de 40 tarjetas de estacionamiento, lo que equivale a 180 pesos. Cumplido ese lapso, y por diez días más tendrá un descuento del 30% sobre el total de la multa.

Cabe destacar que el equipo de inspectores que recorre las calles y supervisa el estacionamiento medido labra por mes un promedio de 3.500 multas, entre usuarios que no colocan tarjetas -un 70%- y un 10% por que expiró el tiempo marcado, y el resto se trata de personas que estacionan sus vehículos en veredas y puentes, que además de estar prohibido, obstaculiza el paso de los peatones.

En cuanto a las multas, hay que resaltar que se labran sobre la patente del vehículo, por lo que el no pagarla hace que el dominio quede registrado con deuda, lo que puede significar un problema al momento de hacer trámites, ya que figura en un registro que cruza la información con otros organismos oficiales como el Registro del Automotor.

El sistema de estacionamiento controlado comenzó a funcionar en 1994 con fuertes rechazos por parte de los vecinos. Hasta el año 2002 estuvo concesionado a una empresa, pero luego la Justicia determinó que volviera a las manos de la Municipalidad, en donde permanece.

A pesar de esta medida hay una costumbre muy difícil de desarraigar entre los lugareños, y que es dejar el vehículo en la puerta del lugar a donde se va. Aún así, ya todos saben que elegir  dejar el auto en las calles del centro hace que se deba tener en cuenta por ejemplo la compra previa de las   tarjetas de estacionamiento controlado.

Otra cosa a tener en consideración es que no se pueden poner más de dos tarjetas y, teóricamente porque en la práctica casi no se cumple, el automovilista transcurrido ese lapso debe mover el vehículo a otro lugar. 

Nuevo diseño y color

Para evitar falsificaciones de las tarjetas de estacionamiento controlado, la municipalidad de San Rafael optó este año por cambiar el diseño y agregarles medidas de seguridad.

Así, las tarjetas para este 2015 son de color dorado con fondo blanco y poseen el escudo de San Rafael con tinta metalizada y en relieve.

Además el diseño se simplificó para facilitar el llenado y evitar que los usuarios se equivoquen al completarla. Dividida en tres cuadros bien separados uno de otro, en uno se debe colocar la fecha, en el otro la hora y el tercer es para perforar o marcar la identificación del vehículo, es decir la patente.

A pesar del nuevo diseño, desde el área a cargo, no descartan que se puedan agregar nuevas tonalidades, pero que será ese el diseño que se utilizará durante este año, en forma conjunta con las  de color violeta, aún vigentes.