Empleados de Ambiente comienzan hoy un paro

Tras fracasar la conciliación obligatoria y las distintas reuniones que se mantuvieron en días posteriores para tratar de solucionar los planteos, los empleados de la Secretaría de Ambiente decidieron iniciar hoy, desde las 8, un paro por 24 horas.
Esta medida se viene analizando desde hace más de una semana, cuando se venció el plazo que impuso el Ministerio de Trabajo para una conciliación obligatoria, que finalizó sin resultados positivos, tal lo que hicieron saber los empleados en un documento en el que cada dependencia exponía los problemas que persistían.

Las principales quejas apuntaban a la falta de los elementos básicos para realizar el trabajo, como por ejemplo teléfonos, computadoras, Internet y vehículos, también que se desautorizaba o se ignoraba la opinión del personal calificado en la materia.

Además los empleados remarcaron que sufrían de maltrato laboral por parte de varios superiores, entre los que estaban la secretaria Mirta Terán, por lo que decidieron declararla persona no grata.

Sin embargo, por sugerencia de ATE, la medida de fuerza se postergó una semana para cumplir con los plazos legales desde que finaliza una conciliación hasta que se pueda convocar a una huelga.

Ese tiempo fue aprovechado por las autoridades y los empleados para tratar de acercar posiciones, pero el viernes de la semana pasada se realizó una nueva reunión en la que estuvo presente Terán, y que lejos de servir para conciliar, agrietó aún más las diferencias, según lo narrado por el delegado de los trabajadores, Arturo Bales.

Allí el referente contó que Terán pidió a cada uno de los trabajadores que se identifique y exprese "el problema que tiene".

Esto colmó la paciencia de los empleados que consideraron que los reclamos ya habían sido expuestos primeramente en distintas instancias en la Secretaría y durante la conciliación.

Igualmente los agentes consideran que "la cuestión de fondo" del problema es el incumplimiento de la Provincia con las normativas que enmarcan el cuidado del ambiente.

Esto se refleja en la reducción de personal en áreas claves y también en la desaparición de programas que se encargaban de gestiones en territorio y áreas protegidas, los cuales dependen ahora de subsecretarías que tienen muchos otros flancos que cubrir.

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