En este marco, advirtió que por las obras inconclusas en este establecimiento educativo el agua que hoy por hoy están utilizando en el jardín está contaminada.

“Hay un problema con las líneas de agua, los caños son muy viejos, de fibra, entonces se han roto y el agua se mezcla en algunos tramos con tierra y hasta con agua servida. Es una obra que arrancaron y la dejaron inconclusa, hicieron el zanjeo y no pasó más nada”, detalló el profesional.

En cuanto a las respuestas por parte del Consejo Escolar, el entrevistado aseguró que sólo se obtuvieron soluciones precarias y temporales. “Pusieron una manguera de agua corriente a los tanques, que obviamente hace años que no se limpian, tienen tierra, moho y esa agua está bajando a las canillas”, precisó.

Marcelo como técnico en emergencias médicas se presentó a exponer la situación ante las autoridades, poniendo de manifiesto el riesgo de seguridad e higiene. De acuerdo a lo informado por el técnico los niños que asisten al jardín tienen riesgos de contraer salmonella, eschericcia coli, meningitis y otras infecciones. En este jardín las clases comenzaron igual.

Así, según confirmó el técnico, el Consejo Escolar “pateó” la situación hacia otro lado, aun habiendo sido los iniciadores de la obra de red de agua corriente.

“Hoy por hoy los chicos no toman agua en el jardín, no tiene con qué hacer el té o la leche. Es una situación de riesgo y después la responsabilidad cae en auxiliares que están haciendo todo tipo de esfuerzo. Y las clases arrancaron igual, obviamente con todos los reclamos que hace la directora Mirian Sires”, agregó el denunciante.

En esta línea redobló la apuesta hacia el Consejo y las autoridades que “se lavan las manos y hacen tareas precarias, hay que cambiar una bomba porque gotea arriba del tablero eléctrico. Mandan una persona, pasado dos personas y todos dicen hay que hacer y no hacen nada”.

Para continuar, Marcelo aseguró que tuvo comunicación con el Ministerio de Salud y realizó el pedido para una denuncia formal por la situación que atraviesa el jardín, contra el Consejo Escolar e Inspectores, porque hay un riesgo de salud e higiene que no se respeta”.

Cabe destacar que el jardín cuenta con el turno mañana y turno tarde, con tres salas por horario de 30 chicos cada una aproximadamente. Esta comunidad educativa cuenta hoy con “olor a materia fecal en el agua de la canilla, saliendo turbia por las mañanas”, precisó el técnico.

El profesional de emergencias médicas concretó que cuenta con documentación con compromisos de inspección donde se comprometen a hacerse cargo mediante un acta. Y hablamos de una situación que viene desde agosto, habiéndose profundizado durante el inicio de este ciclo lectivo. Los padres de los niños en algunos casos están al tanto y en otros no, informó el denunciante.

“Te arreglan las cosas un día y al otro día ya no tenés agua, es un jardín que no tiene agua corriente, tiene agua mezclada con agua servida, no se puede limpiar. Ya saqué audiencia con el Ministerio de Salud para hacer la denuncia basándome en la ley 19589 que es la ley de salud e higiene”, recalcó Marcelo.

Para concluir, expuso que hubo casos de niños enfermos con cuadros de gastroenteritis, erupciones en la piel y viene desde agosto de 2017, con denuncias a partir de estas fechas, agotando las instancias de presentaciones en el Consejo Escolar.