Este martes continuará la búsqueda de Aída, la jubilada dueña de la casa adonde había concurrido Araceli por una supuesta búsqueda laboral. Mientras, la Justicia dispondrá análisis psiquiátricos para establecer si Vinader se trata de un asesino serial.
Fuentes judiciales indicaron que serán cruciales esos estudios para corroborar si Vinader es un psicópata y si su defensa podría apelar a un cuadro de inimputabilidad para que el acusado termine recluido en un psiquiátrico en vez de la cárcel.
Por lo pronto, Vinader iba a ser llevado este martes a la Fiscalía de San Martín para ser formalmente interrogado por el homicidio agravado de Araceli, pero el trámite se demoraría a la espera de la sumatoria de pruebas que permitan incrementar la acusación.
El jueves pasado, el ex prefecto había sido llevado a esa fiscalía cuando el cadáver de Araceli aun no se había encontrado y estaba imputado del delito de privación ilegal de la libertad.
En aquel momento Vinader no declaró, pero a los periodistas les dijo que no sabía donde estaba Araceli y que dejaran a la policía trabajar.
Araceli, de 19 años, desapareció el lunes 30 de setiembre cuando iba a una supuesta entrevista de trabajo a una casa de la calle Puán al 3700 de Caseros (partido de Tres de Febrero), que pertenecía a Aída Amoroso, de 82 años, hoy desaparecida.
Por ahora, los investigadores entienden que el caso de Araceli está prácticamente esclarecido, salvo por los estudios complementarios que permitirán saber si la joven fue abusada sexualmente (el estado del cadáver no permitió saberlo en la autopsia).
Ahora la atención está puesta en tratar de determinar si el ex prefecto cometió otros crímenes.
Los detectives hicieron un allanamiento el sábado pasado en la zona de González Catán para secuestrar restos que resultaron no ser óseos, y recién este martes seguirán con una inspección en la zona para seguir buscando rastros de Aída.
Los fiscales Enrique Velazco Cerviño, Héctor Scebba y Edgardo Ledesma -el equipo designado para resolver estos casos- se tomaron el fin de semana para analizar los resultados de la investigación y ver cómo avanzar en la múltiple pesquisa.
Además, los fiscales de San Martín solicitaron a la Justicia de San Isidro que les remita copia de la causa por el homicidio de Verónica Celeste Fernández, una prostituta de 32 años que apareció asesinada en noviembre del año pasado y que hasta ahora permanecía impune.
Un video que Vinader habría obligado a grabar a Araceli sería clave para unir estos dos casos: en esa cinta se ve a la joven hablando a cámara diciendo que si a ella le pasaba algo tenían que investigar a una ex novia del ex prefecto y a los policías que lo arrestaron en una oportunidad previa por estafa, a los que también acusaba del homicidio de Verónica Fernández.
Serán claves en este sentido las declaraciones testimoniales que presten la ex pareja de Vinader y los policías que fueron mencionados.
Una cuarta víctima podría haber sido Emilio Rezzonico, a quien conoció en prisión y de cuya casa se apropió cuando recuperaron la libertad. Rezzonico estaba enfermo pero no están claras las circunstancias de su muerte porque él se encargo de reportarle a los familiares cómo fue el deceso y de cremar sus restos.
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