Lo único que nos queda por interpretar es que alguien de más arriba le dio el visto bueno a la jueza de que ella va a seguir con la causa, porque de lo contrario cualquier resolución tomada por ella sería de nulidad absoluta”, dijo el letrado.

“No puedo creer que la jueza haya tomado esta medida (el procesamiento), porque los mismos estudios de ADN que se hicieron, dan cuenta de que en el cuerpo de Angélica había restos biológicos de, al menos, tres hombres, ninguno de los cuales coinciden con los de mi defendido. Pero resulta que ahora Francisco queda como el único responsable de la violación y muerte de la niña, cuando no hay un solo testigo que haya afirmado haber visto a Angélica con mi defendido en día previo al crimen. Porqué no se profundiza la pista de los otros tres sospechosos que, cuando menos, abusaron de una menor?!”, exclamó Bareiro.

El profesional también cuestionó “que la jueza González no haya esperado (para dictar el procesamiento) la ampliación del informe de ADN que ella misma había solicitado, como tampoco dio lugar a algunas pruebas que esta defensa solicitó en dos ocasiones. Por ejemplo, pedimos que citen a los dos testigos del allanamiento, porque consideramos a esa medida absolutamente irregular y por eso vamos a pedir su nulidad. Allí secuestraron la zapatilla y algunas prendas de vestir de mi defendido. Pero esos testimonios, como así el de un vecino que vive al lado de la casa de Francisco, aún no fueron escuchados en la causa, violando el precepto constitucional del debido proceso y el de la legítima defensa de mi cliente”, dijo.

Bareiro dijo que “el clima social está muy enrarecido en Puerto Rico, porque nadie cree más en la Justicia. Nadie cree en la imparcialidad de la Justicia. Y si la paz social se ve quebrantada en la comunidad a partir de estas resoluciones, yo hago responsable de eso a todos los jueces que tuvieron a su cargo esta causa cargada de irregularidades”, dijo.