Crece la polémica por las cámaras de seguridad en las escuelas

Crece la polémica por las cámaras de seguridad en las escuelas
El Defensor penal juvenil, Julián Axat, hizo una presentación judicial en contra del Consejo Escolar.

En los últimos años crecieron los controles de “vigilancia” en La Plata. Por un lado, instalaron diferentes fuerzas de seguridad en las calles platenses (policía comunal, bonaerense, gendarmería y en algunos barrios hasta prefectura); y por otro, ha crecido la instalación de cámaras para monitorear la ciudad, sin embargo existe una disputa de hasta dónde se mantiene la privacidad e intimidad de las personas, las cuales están expuestas a ello las 24hs.

En este caso, los niños y jóvenes no pueden ser “controlados” por una constante filmación dentro de la escuela, hay que brindar seguridad sin violar los derechos humanos, y principalmente de los niños.

En el 2011 se instalaron camaritas en la escuela primaria Nº 22 pero ante el fallo dictaminado por el Juez Arias, el 30 de diciembre de ese mismo año, obligó a retirar esos dispositivos y prohibió que se instalen en cualquier otra escuela. Sin embargo, dos años más tarde, mediante la disposición 219/2013 del Consejo Escolar, se instalaron cámaras de vigilancia en el establecimiento educativo de 18 y 71, en el cual funciona la primaria Nº 58 y la secundaria Nº 44. Ante este hecho, el defensor oficial del Fuero Penal Juvenil de La Plata, Julián Axat, realizó una presentación judicial por la cual busca anular dicha resolución; y pidió que se ordene al Consejo Escolar, a la Dirección General de Escuelas y a la institución educativa que "retiren las cámaras de monitoreo fílmico", por considerar que ese control "viola el derecho a la intimidad y al a imagen" de los chicos.

En dialogó con Hoy, el defensor afirmó que “las escuelas tienen que tener seguridad, pero tiene que venir del lado de las alarmas monitoreadas y tiene que haber seguridad externa, es decir, ventanas y puertas adecuadas, todas las herramientas adecuadas”.

Además resaltó que si es necesario, por “las diferentes escuelas que están expuestas a determinados antecedentes de riesgo, o de vandalismo tiene que haber un sereno”. Y agregó que lo planteado es algo que “debe discutir toda la comunidad educativa, tanto los padres, docentes y alumnos”, aseguró a Hoy.

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