Los areneros sin cobertores son un medio de contaminación Un alto porcentaje de niños son asistidos por problemas visuales provocados por el llamado toxocara canis, un parásito presente en la mayoría de los perros.
En la mayoría de los espacios públicos, perros y gatos transitan con libertad. En su deambular, liberan los desechos que contaminan el medio ambiente, que en pocas ocasiones son removidos. Los areneros suelen ser uno de los lugares preferidos por las mascotas, que al dejar sus heces sueltan un peligroso parásito denominado toxocara canis. Éste, cuando ingresa al organismo humano como huésped accidental, puede provocar daños severos a nivel pulmonar, del hígado y también del ojo, donde llega a través del torrente sanguíneo para instalarse y construir una suerte de “nido” .
“Se calcula que un perro con toxocariasis libera en su materia fecal entre 20 mil y 200 mil huevos de parásitos al día, lo cual se traduce en un enorme potencial de contaminación presentes en las plazas, veredas y parques; cuando quienes tienen una mascota no recogen las deposiciones y también en el hogar”, advierten los profesionales que alertan a la población remarcando que “a diario, se convive con agentes infecciosos, bacterias, microbios y parásitos que ocasionan serias enfermedades; siendo los niños los más proclives a contraerlas por sus hábitos de juegos vinculados a la tierra o arena; contacto cercano con estos animales y la costumbre de comer o llevar las manos sucias a la boca”.
“Según un relevamiento de la Cátedra de Parasitología General de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA, el 100 por ciento de las plazas porteñas estudiadas están contaminadas con huevos de ese parásito. Otro tanto, ocurre en varias ciudades del interior, a juzgar por un estudio reciente del Instituto de Medicina Regional de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE), que constató la presencia del parásito en chicos y en espacios públicos de Resistencia y Corrientes”, revela un informe en nuestra mesa de redacción.
EL CUIDADO DE LAS MASCOSTAS
En Pehuajó, un alto porcentaje de personas conviven con sus mascotas; queda claro que son responsables de cuidarlas; también de consultar al profesional de confianza el modo de desparásitarlos; una necesidad que suele pasar inadvertida por la creencia de hacerlo solo cuando el animal es cachorro.
LA CONTAMINACIÓN EN PEHUAJÓ
En nuestra ciudad se están tomando medidas para controlar la situación; sin embargo, en algunos establecimientos educativos y en varios espacios recreativos aún se observan la instalación de areneros que utilizan los pequeños para el entretenimiento; también las mascotas solas o acompañadas por sus dueños, que a diario visitan esos lugares.
Para indagar sobre el tema, dialogamos con la secretaria de Medio Ambiente de la Municipalidad, ingeniera Julieta Martín.
“Los areneros, ampliamente utilizados en jardines de infantes y en espacios de recreación, constituyen un ambiente propicio para la transmisión de zoonosis entre el hombre y los animales. Esto se debe a que dichos sitios suelen ser utilizados por los animales, generalmente perros y gatos, para la defecación”, explicó Martín y añadió: “Al ser contaminados con estos residuos se transforman en sitios ideales para la proliferación de diversas especies de parásitos, constituyendo un riesgo sanitario potencial para la población, principalmente los niños que allí juegan”.
MEDIDAS PREVENTIVAS
Acerca de las medidas preventivas reveló que: “Actualmente la tendencia es la erradicación, como consecuencia de estudios científicos que han demostrado tanto la existencia de parásitos en los areneros, como la incidencia en la salud de los niños. En aquellos lugares donde se encuentran presentes, es importante tomar medidas sanitarias y preventivas adecuadas. En los establecimientos educativos se debe restringir la entrada de las mascotas mediante barreras efectivas, como rejas o alambrados, y cubrir con algún elemento de protección dichos espacios cuando no son utilizados. A su vez se deben limpiar diariamente los lugares, retirando las excretas si las hubiere. Una acción complementaria efectiva es la desinfección de los sitios y terrenos aledaños utilizando productos químicos nocivos para los huevos y larvas con potencial infectivo, que no representen daño para la salud de los niños”.
MEDIDAS LOCALES
Consultada si existe una ordenanza Municipal para proteger la ciudadanía del peligroso inconveniente señaló: “Cuando se realizaron los últimos arreglos en el Parque General San Martín, el área donde estaba un arenero se reemplazó por tierra para sembrar pasto. Asimismo, los jardines de infantes que aún los utilizan, se recomienda además de cubrirlos con un cobertor, tomar las medidas necesarias de higiene”.
“Los niños se llevan las manos a la boca, también acostumbran a almacenar la arena contaminada en los bolsillos del delantal o de la ropa, que luego, transportan a otros lugares”, advirtió la facultativa.
CAMPAÑAS DE CONCIENTIZACIÓN
En la mayoría de los casos, los menores disfrutan del esparcimiento sin fijar las consecuencias de la problemática de los areneros. Es deber de los adultos fomentar acciones informativas con el objetivo de lograr una conducta responsable a través de la Educación para la Salud. Se trata de proteger a nuestros hijos y nietos para evitar que contraigan enfermedades.
“Los chicos, al estar en contacto con los animales suelen acariciarlos, por eso quienes tienen mascotas deben desparasitarlas”, insistió Martín, quien consideró: “Sería importante realizar campañas de concientización para fomentar el cuidado de la salud en nuestro distrito”, concluyó.
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