El optimismo que evidenciaban las autoridades del Consejo Escolar un mes atrás, se derrumbó por completo. La intención de que todas las escuelas estén reparadas a tiempo para el inicio de clases se hizo añicos. Y entre los responsables de no poder cumplir con los objetivos, una de los apuntados es el municipio. “Tenemos varios establecimientos con obras sin iniciar y los retrasos en su mayoría son por parte del Emsur” afirmó Amalia Rey, en diálogo con 0223, a días del comienzo del ciclo lectivo.

La dirigente especificó que incluso “podría haber en determinados colegios alguna suspensión de clases de tipo técnico, porque hay que arreglar por ejemplo techos, no se puede hacer eso con alumnos dentro”, graficó.

Rey contó que entre las demoras en las tareas del Emsur “está la limpieza de los tanques de agua, lo expresamos esta semana en la comisión de salud, hay riesgo de inicio de clases en varios establecimientos”, anticipó.

A la espera de la autorización para la utilización de fondos por parte del gobierno provincial, a fin de poder realizar algunas contrataciones directas, la titular del Consejo Escolar insistió con los incumplimientos del gobierno comunal: “Es lo que más nos preocupa, las obras que quedaron pendientes por parte del Emsur. Al 31 de enero todos los trabajos que había que realizar estaban adjudicados. Durante febrero poco se hizo y ahora obviamente queda muy poco tiempo, es frustrante”, sentenció.

En esa línea Rey citó algunos ejemplos, entre ellos, la situación de la escuela agraria: “Tiene cegado de pozo ciego, una tarea también a cargo del Emsur, se presentó como emergencia en agosto de 2016. No es que uno deja un papel y se va. Cuando vos haces circular el pedido por todos lados, haces notas, reclamas, pedís celeridad, si hay voluntad política, se hace. Para cualquiera puede llegar a ser un edificio más, pero es una escuela donde tienen que asistir cientos de chicos. Tener que decir, al 6 de marzo, que tal escuela no puede recibir alumnos porque no se hicieron las obras, es frustrante”, reiteró.

“No hemos tenido la respuesta que necesitábamos. Tampoco desde la Dirección de Infraestructura provincial, que no aceptó el gasto para instalar un servicio de internet en el edificio del Consejo Escolar. Nos pone en total incomunicación. Se sabe, todo lo que se hace es por internet. Nos dicen que no está previsto en su presupuesto. Es una cuestión de criterio, porque el dinero del Fondo Compensatorio, está destinado para el mantenimiento de edificios y el Consejo en definitiva es un edificio escolar. Y acá no somos nosotros solos, está toda la sede distrital de educación provincial, la regional, la DPI. El servicio que hay es muy escaso para satisfacer la demanda. Y el gasto a cubrir, anual, no supera los 35.500 pesos, tampoco es una inversión grande”, describió. 

“La realidad es muy cruda. Hay que estar luchando contra la bendita burocracia, que es necesaria pero se transforma en impedimentos. Y esto no es cuestión de estar llorando, es mostrar la realidad. Después la culpa siempre la tiene el Consejo Escolar”, concluyó Rey.