En medio del escándalo por presuntas irregularidades y las peleas por espacios de poder, otra oscura realidad ocultan la UNT y sus representantes en Yacimientos Mineros Agua de Dionisio (YMAD): Según un informe oficial, utilizan 267 kilogramos de cianuro por día en el proceso de extracción de oro en Farallón Negro.
Curiosamente, ninguno de los informes de los representantes de YMAD ni tampoco los representantes de la UNT en el consorcio minero: Florencio Aceñolaza, a quien le quedan dos años de gestión, y el saliente Rodolfo Martín Campero, mencionaron este grave problema ambiental. Uno es geólogo y el otro médico, por lo tanto no pueden ignorar esta realidad, pero el hecho es que ninguno la menciona.
En la propia página de la Secretaría de Minería de la Nación, según pudo comprobarlo EL SIGLO, el uso del cianuro para la extracción de oro es cosa de todos los días. Según la información a la que accedió nuestro el consumo de cianuro es de 8.000 kilogramos mensuales, o sea que se están utilizando aproximadamente 267 kilogramos de este peligroso compuesto por día.
Veneno
La bibliografía internacional advierte que el cianuro es muy tóxico y potencialmente letal si no se manipula bajo ciertos cuidados ambientales. Por otro lado, se advierte que es muy peligroso para las persona ya que es muy tóxico por inhalación o por contacto con la piel y por ingestión y además puede causar quemaduras en la piel y ojos. Además es peligroso para el medio ambiente ya que en contacto con ácidos puede liberar cianuro de hidrógeno, que es un gas muy tóxico. Debido a estas características algunos países como Hungria y la República Checa o estados como Montana y Wisconsin en los Estados Unidos han prohibido el uso del cianuro.
De acuerdo a la información a la que tuvo acceso EL SIGLO la planta existente en Farallón Negro es para la lixiviación, mediante el uso del cianuro, para la recuperación de oro y plata, donde se procesan 300 toneladas por día de mineral de alta ley. El mineral de baja ley es sometido a un proceso de lixiviación en pilas, a un ritmo de 120 toneladas por día. La lixiviación es un proceso por el cual la roca que contiene el oro es transformada en polvo y luego este polvo es sometido a la acción de un baño de cianuro con lo cual se obtiene el oro. Hasta el momento, existen dos fuentes de roca con oro en Farallón Negro: una es denominada veta Farallón y la otra Alto de la Blenda. La cianuración de oro es muy controvertida debido a la naturaleza tóxica de cianuro. A pesar de que el cianuro libre se descompone rápidamente cuando está expuesto a la luz del sol, los productos menos tóxicos, como cianatos y tiocianatos, puede persistir durante varios años. Los famosos desastres tienden a no matar a muchas personas, los seres humanos pueden ser advertidos de no beber ni acercarse a la contaminación del agua, pero los derrames de cianuro pueden tener un efecto devastador sobre los ríos, matando todo por varios kilómetros aguas abajo. Los peces son las víctimas más evidentes, pero en realidad colapsa toda la cadena alimentaria, desde el fitoplancton hasta águilas pescadoras.
Interrogantes
Esta grave situación ambiental encubierta por la UNT e YMAD deja varios interrogantes: ¿Cómo se transporta el cianuro hasta Farallón Negro? ¿En camiones a través de la ruta a los Valles Calchaquíes con el peligro que ello representa al atravesar centros poblados? ¿La UNT, al ser parte de YMAD, está cumpliendo con las normas ambientales que le corresponde por ser un organismo nacional y como tal cumplir con la legislación sobre residuos peligrosos? ¿Qué controles se realizan diariamente en el ambiente y en las personas que trabajan en Farallón Negro? ¿El rector Juan Alberto Cerisola conoce esta situación?
Farallón Negro se encuentra situado en el distrito Hualfín, del departamento catamarqueño de Belén, a 24 y 40 kilómetros al Oeste de las poblaciones de Los Nacimientos y Hualfín, respectivamente; 90 kilómetros al Suroeste de Belén y 130 hacia el Noroeste de Santa María, a una altura de 2.600 metros sobre el nivel del mar.
La mina está ubicada en una zona montañosa donde existen numerosas quebradas, por las que el agua fluye en la temporada estival, después de las precipitaciones, generalmente, torrenciales.
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