La ciudad vive a pleno Semana Santa, con un altísimo nivel de ocupación

La ciudad vive a pleno Semana Santa, con un altísimo nivel de ocupación
Las minivacaciones que se formaron por los días de Semana Santa junto al feriado por el 2 de abril, atrajo a gran cantidad de turistas a la ciudad que colmaron la capacidad. El director de Turismo del Municipio, Ernesto Palacios, aseguró que el nivel de ocupación es altísimo y que ronda el 99 por ciento.
“Hay muchísima gente que compró paquetes, sobre todo de cabañas y hotelería por 5 o 6 noches y que ya estaban reservados con mucha antelación. En este momento hay campings libres, así que a la gente que viene con carpas la estamos derivando ahí, pero ya no hay nada de alojamiento”, informó.

Por otra parte, el funcionario afirmó que “muchas personas ha ofrecido su casa pero no han aceptado hacerlo por uno o dos días, cosa bastante insólita. La demanda hoy es así, de uno o dos días porque muchos turistas, como está de paso, quiere hacer noche en Tandil, o combinar con la costa y se le puso muy difícil a algunas inmobiliarias. De cualquier manera, está todo ocupado”.

“Tenemos un flujo altísimo de visitantes, algunos vienen por el día, otros están tan entusiasmados que quieren pasar la noche y se les está haciendo difícil pero muchos han venido preparados para la contingencia, con carpas, y son los que se están derivando a los distintos campings”, explicó.

Los paseos, colmados

En cuanto a las actividades que realizan los turistas, Ernesto Palacios resaltó que “venimos muy bien en todo sentido” y destacó el buen clima que caracterizó a los días previos a la jornada de ayer, donde cayeron algunas gotas.

“Tenemos una importante combinación de público, por un lado, los peregrinos movidos por la fe que vienen a celebrar Semana Santa, participan de las actividades litúrgicas y de las misas, también de la procesión. Por otro lado, está el turista que viene a disfrutar, a descansar, a ver las distintas ofertas culturales”, especificó.

En esa línea, subrayó que “se han colmado todos los paseos y las ferias. Todo se viene desarrollando muy bien, con un movimiento muy lindo, muy armónico”.

Por otra parte, recalcó la importancia de la presencia policial que hay en la ciudad en estos días. “Nunca había ocurrido que tuviéramos un refuerzo de 170 policías, se nota en la calle”, remarcó.

Menos ventas

Por su parte, Rodrigo Inza, secretario del Instituto Mixto de Turismo, señaló que, “comparando con las ventas de años anteriores venimos igual o un poquito más abajo” en el comercio dedicado a la venta de productos regionales.

Por eso, consideró que quizás es “demasiada” la oferta durante los días de Semana Santa, con lo cual “año tras año ha dejado de ser lo que era tiempo atrás, cuando eran pocos los restaurantes que había, los que vendíamos productos regionales”.

De todas maneras, sostuvo que “hay mucho movimiento. La ciudad está colmada en lo que es alojamiento pero se da la particularidad que el Viernes Santo muchísima gente venía a pasar el día a Tandil y este año no vi esa cantidad de público”.

El estado de las rutas

En cuanto a los comentarios de los turistas, indicó que “en líneas generales manifiestan que la ciudad está muy linda y que les gusta mucho”, al igual que todos los paseos.

“Lo único que vienen marcando reiteradas veces desde el verano es el estado de las rutas y sobre todo la gente que viaja por la 74. Muchos nos preguntan cómo salir por Ruta 30 porque les dijeron que no salieran por la 74 porque está muy rota”, sostuvo el empresario del sector.

Fin de semana largo

A su turno, Ariel Bardiza, propietario de un complejo de cabañas, consideró que “no hay tanta gente buscando alojamiento a último momento como otros años”, y evaluó que esta modalidad “tiene que ver con que son 5 o 6 noches y la gente tenía posibilidad de irse a otros destinos más lejos. Había otras opciones al ser tantos días”.

“A Tandil siempre nos favorece cuando el fin de semana es de 3 o 4 noches”, ratificó el prestador turístico.

En esa línea, analizó: “No veo tanto desborde como otros años pero no creo que hayan quedado plazas vacías. Y hay que tener en cuenta que éstas han aumentado considerablemente; la oferta es cada vez mayor”.

Como conclusión manifestó que “a nosotros nos conviene más tener dos fines de semana largos, si Semana Santa hubiese caído otra fecha, en vez de tener uno tan largo de 5 o 6 noches”.

“Es mejor para los productos regionales en cuanto a que la gente va una vez sola a comprar recuerdos para llevar a Buenos Aires. En cambio, si se desdobla en dos fines de semana vienen dos grupos distintos de personas, que irían en dos oportunidades a buscar a esos productos”.

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