Una serie de llamadas referidas a un proyecto de ley generó una tensa discusión en el octavo piso de la Legislatura. La inusual situación, que ocurrió cerca de las 13 de ayer, tuvo como protagonistas al legislador Marcelo Caponio (FpV) y al presidente del Ente Regulador de Servicios Públicos de Tucumán (Ersept), Sergio Sánchez.

El parlamentario increpó al titular del ente de control cuando éste salía de una conferencia por el Día Mundial del Consumidor. En el acalorado intercambio, lo acusó de haber intentado frenar una iniciativa que prohibe a EDET cortar el suministro de energía eléctrica por falta de pago. Según Caponio, Sánchez había acudido para tal fin al ministro de Desarrollo Productivo, Juan Luis Fernández.

“Recibí una llamada de ‘Lucho’ Fernández de parte suya. Yo interpreto que quiso presionarme”, disparó Caponio en el momento en el que Sánchez abandonaba el salón donde se realizó el acto. “Es una deducción suya que yo le haya pedido que lo llamara a usted. Le pido disculpas por eso”, respondió Sánchez, quien aseguró que había hablado con el funcionario provincial para expresarle su preocupación por las implicancias que podría tener la normativa.

Asimismo, le reprochó al ex secretario de Gobierno que no se hubiera consultado al Ersept en la etapa de elaboración de la iniciativa. “Usted no va a decirme qué proyecto puedo elevar, esa es una facultad que tengo”, retrucó el legislador.

“Tomé toda esta situación como una fuerte presión contra mi proyecto. Usted tiene la responsabilidad de velar por los intereses de la gente, del Estado y, después, de las empresas. Yo quiero que la gente tenga luz”, afirmó Caponio, a lo que Sánchez contestó: “¿De dónde sacó que yo no quiero eso? Me desprestigia al decir que quiero beneficiar a las empresas. Tucumán fue una de las provincias con la tarifa más baja. ¿Eso es beneficiar a las empresas?”.

Tras el tenso intercambio y sin acercar posiciones, los participantes se dieron un apretón de manos y procuraron no subirse al mismo ascensor.

Critican a la SAT por pedir una suba

El pedido de aumento tarifario del 80% realizado por la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) fue cuestionado por dirigentes políticos opositores al Gobierno provincial. “Resulta indignante que la SAT estudie subir la tarifa del agua en lugar de analizar cómo reparar los cráteres que deja en la ciudad”, afirmó el secretario de Gobierno capitalino, Walter Berarducci. Las críticas también alcanzaron al directorio del Ente Regulador de Servicios Públicos de Tucumán (Ersept). “Antes de que el Ersept autorice un aumento para atender los pedidos de una de sus empresas ‘amigas’, nos gustaría que nos acompañe a reunirnos con los miles de vecinos que sufren con el pésimo servicio”, dijo el legislador José María Canelada (UCR).

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