Javier Miglino, cofundador de Bullying Sin Fronteras, se refirió a los inicios de la problemática y recordó que “en sus comienzos, cuando un chico atravesaba un problema de bullying se le exigía al niño que se hiciera cargo de su problema alentándolo a asumir personalidad” explicó y aclaró que estas sugerencias provenían de profesionales.

Sin embargo y pese a los primeros estudios sobre situaciones de Bullying, Miglino señaló que “este es un problema que afecta a los chicos pero corresponde resolverlo a los mayores, no a los niños, porque al fin y al cabo si los más chicos aprenden agresión quizás provenga de sus casas” dijo. 

A partir de la nueva visión social y la concientización sobre el tema “es que desde América Latina las cosas empiezan a observarse de manera diferente y se entiende que es un problema del que los grandes nos tenemos que responsabilizar” señaló.

“Con ese concepto nació en 2007 Bullying Sin Fronteras” comentó y agregó que la ONG cumple con los objetivos de brindar ayuda y sostén a los niños y familias que padecen bullying.

Sobre el tema, el especialista señaló que “hace falta legislación sobre Bullying, no solamente en la Argentina -donde existe una Ley aprobada que no fue reglamentada por el Ejecutivo de la Nación- sino que además, es una carencia que afecta a toda América Latina.

Observatorio de Bullying en la Argentina

Otras de las actividades que Bullying Sin Fronteras lleva adelante la constituye el Observatorio nacional de Bullying encargado de elaborar cada mes las estadísticas que ponen de manifiesto la situación del Bullying en Argentina. Los datos arrojados indican que “tenemos entre 140 y 148 casos importantes y graves de bullying” dijo, que comprende chicos fracturados y lastimados y que forman parte de los casos que llegaron a la Justicia y a los Ministerios de Educación.

De los estudios recientes se desprende que los distritos donde se registra la mayor violencia en casos de bullying pertenecen a las provincias de Formosa y Salta. En tanto en la ciudad de Buenos Aires el bullying se registra en “cantidades importantes” dijo pero “son del tipo psicológico y no físico, es decir que son chicos que resultan hostigados permanentemente pero que a sus casas no llegan con algún moretón” explicó.

Finalmente y entre otras cosas Miglino destacó el trabajo que lleva adelante la Fundación y reconoció la necesidad de apuntalar la búsqueda de concientización a través de charlas y talleres que se distribuyan a lo largo y a lo ancho del país con el propósito de generar cambios en las conductas sociales agresivas. Compartió públicamente su deseo de marcharse de la ciudad “no sin antes organizar un Encuentro Provincial de concientización sobre Bullying” dijo y alentó la idea de que Chubut pueda acceder y participar de esta iniciativa con el fin de dar a conocer la problemática y concientizar de una realidad que avanza en las sociedades de nuestros días.