En su segunda edición, el Black Friday se consolidó como el período de mayor venta para el comercio posadeño, superando nuevamente a fechas tradicionales de alta actividad como los días previos a Navidad, Día de la Madre o del niño. Pero la suerte no fue pareja para todos los empresarios ya que los compradores premiaron a aquellos que ofrecieron descuentos considerables y castigaron a los que no lo hicieron o se limitaron a ofertar pocos artículos. Indumentaria, calzados, electrónica, electrodomésticos y celulares fueron los rubros que mejor trabajaron. Llegaron clientes desde el interior de la provincia, Paraguay, sur de Brasil y norte de Corrientes.

Desde la mañana del viernes hasta bien entrada la tarde de ayer, el panorama en el microcentro posadeño estuvo marcado por un alto tránsito de personas y gente consultando en todos los locales, incluso antes del horario de apertura había colas frente a las puertas cerradas de los comercios. Pero a diferencia del año pasado, esta vez los clientes se tomaron tiempo para recorrer, preguntar pecios y comparar antes de concretar una compra.

El resultado fue que mientras los que ofrecieron descuentos importantes vendían constantemente, los demás atendían muchas consultas pero vendían casi lo mismo que en un día normal. Uno de los comercios que se destacó por la cantidad de artículos vendidos fue Laredo Hombres, el propietario del negocio, Jorge Abildgaard, se mostró muy conforme con la respuesta de los clientes. “Es constante el flujo de gente y todos salen con una bolsa en la mano”, remarcó.

Atribuyó el éxito en ventas a que ofrecieron descuentos importantes en una amplia gama de productos. Todo lo de temporada de invierno e incluso prendas de media estación se ofertaban a mitad de precio. “Quienes llegaron a nuestro local estos días pudieron comprar un prenda de una marca importante, de primera calidad, al mismo precio al que habitualmente se ofrecen prendas de marcas mucho menos conocidas”, dijo.

Otro de los locales que trabajo a pleno fue Apple Boutique, de Nélida Madelaire. “Trabajamos con honestidad, ofrecimos descuentos reales en muchos artículos y los compradores respondieron. Además para nosotros fueron días de fiesta y trasladamos ese espíritu a las veredas y eso también ayudó. Nos preparamos con todo, organizamos todo para la ocasión, pusimos música, decoramos y sacamos a la vereda a promotoras muy llamativas”, indicó.

En otra de las más tradicionales boutiques del centro posadeño, Etam, también se mostraron muy conformes con las ventas alcanzadas y lo atribuyeron a que sus precios tenían rebajas importantes. Todas las prendas de años anteriores estaban con descuentos de más de 50 por ciento, algunas prendas, hasta 70 por ciento, mientras que todo lo de fin de temporada estaba a mitad de precio”, señalaron.

Los celulares fueron otra de las vedettes de las jornadas de descuentos, en los locales de Personal se ofrecieron rebajas de entre 20 y 25 por ciento en recambio de equipos y las ventas fueron muy superiores a la media.

Carlos D’Orazi, propietario de D’Orazi Márquez señaló que los electrodomésticos también fueron protagonistas. “Nos resultó muy difícil conseguir mercadería que pudiera ser ofrecida con descuentos importantes, pero hicimos nuestro mejor esfuerzo y el cliente respondió bien”, dijo. Destacó que en ese rubro, fue muy importante la demanda de brasileño que arrasaron con productos pequeños de alta gama, como notebooks, tablets y celulares tipo smartphone liberados.

El comerciante advirtió por la cantidad de clientes que se acercaron con intensiones de comprar, pero no consiguieron hacerlo porque el límite de consumo de sus tarjetas no alcanzaba.