El concejal por el Frente Amplio Progresista en Avellaneda Rubén Conde se refirió a la división del oficialismo en el Concejo Deliberante luego de que una fracción de ese bloque apoyara un informe en contra de la directora de Tránsito municipal, Nora Moreno. “No es más ni menos que la disputa política entre el kirchnerismo y el sciolismo, y en Avellaneda reflejada por el intendente (Jorge) Ferraresi y el ex intendente (Baldomero ‘Cacho’) Álvarez de Olivera”, consideró.

El edil del FAP interpretó de ese modo el proyecto aprobado, que denuncia “irregularidades” en el desempeño de la funcionaria. “Es una visión que tuvieron los miembros de la Comisión de Transporte (del Concejo) con respecto a la visita de la directora de Tránsito, que no esclareció ninguno de los puntos planteados respecto a ciertas normas que utilizaba para entregar las licencias de conducir especialmente a remiseros. Estaba tomando ciertas atribuciones que la ley no le da”, comentó.

Al respecto, Conde formuló su propia interpretación de las fisuras que evidencia el oficialismo al argüir: “Valoramos lo que ocurre en función del propio ‘internismo’ que tiene el peronismo y que se transforma en oficialismo y oposición al mismo tiempo. Es histórico en la provincia y el los Concejos bonaerenses”.

En ese marco, sostuvo que desde su bloque intentan “aprovechar que esa división” les “permita tener una visualización mayor de algunos pedidos informes” que anteriormente no tenían posibilidades “de llegar a destino”. “A partir de esta ruptura estamos logrando que algunos lleguen al Ejecutivo, ahora tenemos que lograr que nos contesten los pedidos”, sentenció el edil, quien advirtió que “mientras el ‘internismo’ no se transforme en un problema para el municipio, eso lo tendrá que dirimir el peronismo en sus internas y a partir de eso se dilucidará quien comanda en Avellaneda”.

Por otra parte, Conde analizó el apoyo que su bloque brindó a un pedido de informes sobre una emergencia sanitaria en Villa Tranquila. “Después de las lluvias se habían dado cuadros críticos de chicos con problemas de salud en Villa Tranquila y le pedimos al municipio que explique qué papel había jugado y si mandó asistentes sociales”, postuló al respecto.

Por último, adelantó un nuevo proyecto que analiza su espacio político: “Presentamos un pedido de informe porque nos llegó información de algunos manejos raros, por decirlo livianamente, en los geriátricos de Avellaneda. A partir del año pasado que se reformuló la ley de geriátricos provincial, el municipio tiene potestad y estamos pidiendo al Ejecutivo que tome manos en el asunto y nos informe del estado de los geriátricos en Avellaneda”, completó el concejal.