Las explosiones fueron registradas alrededor de las ocho de la mañana, este martes, en una terminal del aeropuerto de Zaventem, en Bruselas, y en una estación de subterráneo cercana a las sedes de la Unión Europea en el centro de la ciudad.

Según un primer informe de la policía federal, había un muerto y varios heridos. Pero un fiscal ya informó oficialmente que la cifra es de al menos 13 víctimas y un número no determinado de heridos, que los medios cifran en 35 hasta el momento.

Las deflagraciones se produjeron en una puerta de embarque hacia Estados Unidos, arrollando a un gran número de personas, señaló un testigo citado por la radio pública francófona RTBF. El mismo testigo mencionó "mucha gente ensangrentada".

Las autoridades no confirmaron por el momento el origen de las explosiones. Sin embargo, la agencia de noticias Belga señala que hubo disparos y gritos en árabe antes de las deflagraciones. La cadena pública VTR asegura sin citar fuentes que se trata de un atentado suicida.

Todos los vuelos fueron suspendidos, añadió el servicio de control del tráfico aéreo.

Atentado en el metro

Otra explosión se produjo este martes en la estación del tren subterráneo del barrio donde se encuentran las instituciones europeas en Bruselas, indicaron un empleado de la empresa de transporte público y testigos a medios locales.

En la entrada de la estación de Maalbeek podía verse humo negro, según imágenes de la televisión pública RTBF.

Las explosiones se produjeron dos días después de que el principal sospechoso por los atentados de París, Salah Abdeslam, fuera detenido en Bruselas.