“Fue el primero habilitado en la provincia de Buenos Aires por el OPDS, en ese momento la reglamentación era distinta y en 2016 se sancionó la Ley de presupuestos mínimos para la gestión de envases vacíos de agroquímicos donde se habla de una responsabilidad compartida del usuario y del registrante de los bidones; en el 2018 se reglamentó esta ley y hoy en día estamos trabajando en conjunto con la Fundación Campo Limpio”, contó esta mañana (jueves) la directora de Ambiente y Desarrollo Sustentable del Municipio, Valeria Sirotiuk, para remarcar el compromiso demostrado por los productores y aplicadores.

Acerca de los beneficios, Sirotiuk señaló que “lo que se busca con los Centros de Acopio y trabajando en conjunto, a partir de la firma de un convenio con la Fundación Campo Limpio, es el cuidado de las personas y del medio ambiente para que estos residuos tengan un destino sustentable y cuando sean reciclados tengan la utilización correcta”.

Asimismo recordó que “ya llevamos casi tres años trabajando en conjunto, nosotros recibimos los envases vacíos y ellos están encargados de la logística y el destino final de estos residuos y el año pasado se construyó una nueva celda para recibir los envases de Categoría B, que son las cajas y bolsas que no pueden recibir un triple lavado, así que estamos recibiendo las dos categorías de residuos”.

En cuanto a la metodología de trabajo, Sirotiuk explicó que “los bidones tienen que estar con el triple lavado o lavado a presión y deben estar perforados e inutilizados” y destacó que “todos estos años de trabajo han demostrado el compromiso de los productores y de los usuarios porque todos los envases que nos llegan tienen el triple lavado y perforado”.

Al respecto comentó que “cuando son cargas pequeñas se reciben sin aviso previo pero cuando son cargas de más de mil bidones hay un número de contacto para coordinar la recepción de los bidones, y hemos notado un aumento año a año de los bidones que se van recibiendo”.

Sirotiuk destacó la toma de conciencia que hay en torno al tema y lo atribuyó en parte al trabajo que se viene haciendo y a la ley marco que obliga al productor y al aplicador a devolver los envases a un centro de acopio.

En cuanto a la capacidad del CAT y al volumen de trabajo, Sirotiuk comentó que “tiene capacidad para aproximadamente 6.000 bidones de Categoría A, en temporada alta cargamos una vez por semana un camión y en temporada más baja cada 15 ó 20 días, eso denota el compromiso de los usuarios de los envases”.