Para Calles la mayoría de los maíces están perdidos y su destino será el picado para silo y su venta a feedlots o tambos.

"Los lotes que estoy viendo de maíz tienen sólo un 20 a un 50% de espigas y con muy pocos granos", señaló el técnico, aunque reconoció que los maíces de segunda tienen chances todavía de salvarse.

"El impacto de esta lluvia hay que evaluarlo dentro de una semana y diagnosticar el rinde potencial perdido", aseguró Calles.

En cuanto a la soja, el técnico linqueño analizó que en la de segunda hay poco para salvar debido a que la planta presenta fuertes signos de quemado de hoja. La soja de primera sería el cultivo que mayores probabilidades tiene de recuperarse, sobre todo aquellas cuyos lotes tuvieron un buen tratamiento de coberturas y humedad. "Pero aquellas sojas de primera sembradas sobre verdeos tienen una alto grado de pérdida", detalló el agrónomo.

Informes

En otro orden, el presidente del INTA, Carlos Casamiquela, se refirió a la actual situación de déficit hídrico que se vive en varias zonas de la Argentina.

El presidente del organismo aseguró: "Esta sequía no tiene nada que ver con la sufrida en 2008". El déficit hídrico actual es muy desordenado, en algunos lugares impactó más fuerte y en otros no se registran mayores problemas.

"En unos diez días -dijo Casamiquela- vamos a tener un análisis por cultivo, departamento y partido, una evaluación sobre la situación y el efecto de estas lluvias, debido a que en los lugares donde está lloviendo se modifica la situación que se perfilaba hace unos días".

Sin embargo, de acuerdo a un informe efectuado por técnicos de los Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA), que también realizaron un relevamiento de la disponibilidad de humedad en distintas regiones del territorio nacional, la sequía que afecta a la campaña agrícola 2011/12 puede resultar de mayor impacto que la de 2008/9.

Sucede que la actual comenzó antes: ya en diciembre empezó a notarse el déficit hídrico. En el ciclo 2008/9, en cambio, la escasez de lluvias comenzó en enero. Además, la presente está más extendida, geográficamente, que la anterior.

Asimismo, durante el 2008/9 los productores tenían una situación económica más holgada, luego de varios años de rendimientos normales y de precios satisfactorios. En 2011/12, por el contrario, muchos no pueden vender el trigo y el maíz del ciclo anterior, lo que reduce seriamente su liquidez, señalaron desde el CREA.