El abogado José del Río informó que dejó de representar a la familia del cura fallecido Juan Viroche, debido a una disparidad de criterios y de común acuerdo con los familiares del sacerdote de La Florida.

El abogado detalló que esa diferencia de criterios se debe a que él se inclina más por la hipótesis del suicidio. “Hasta ahora no se presentó ningún elemento de prueba que sostenga la teoría del homicidio” aseveró en declaraciones al portal Los Primeros.

En tanto, Del Río confirmó que en los próximos días se incluirán en la causa el perfil psicológico que se está realizando del padre Juan, como paso en el caso Nisman y también se realizó este tipo de pericias en la investigación por la muerte de Paulina Lebbos. Se sumarán además a las pericias telefónicas que podrían aportar importantes datos en cuanto a las amenazas que el cura recibía diariamente.

“Es un homicidio si hubo amenaza de muerte, pero en este caso hay que ver qué incidencia puede tener, a mi criterio, las pruebas acentúan la hipótesis del suicidio, es importante el aporte que se incluirá en la causa de los profesionales que llevaron adelante la reconstrucción del hecho” agregó del Río, destacando el trabajo que viene realizando el fiscal Diego López Ávila.

El letrado fundamenta su postura en lo que está técnicamente incluido en el expediente. “Está prácticamente descartada la presencia de otra persona en el lugar, no hay ninguna situación que llame la atención como algún signo de violencia, no vi otro objeto además del vidrio roto y el Cristo” consideró del Río. Además dijo que las fotos que circulaban pueden haber sido tomadas en situaciones delictivas anteriores.

“Sé que recibí muchas críticas por la opinión que he dado, creo que la sensibilidad tiene un precio y es lo que he pagado el tiempo me dará la razón quizás” aseveró el abogado ya apartado del proceso, reiterando que sus consideraciones se sustentan en los elementos recogidos hasta ahora en la causa.

Asimismo, el abogado dijo desconocer si Viroche había hecho una denuncia formal contra el narcotráfico a fuerzas provinciales o federales, esperando que el trabajo que realizó el religioso siga con la investigación correspondiente. “Como ciudadano y también miembro de la Iglesia creo en la Justicia, pido que seamos cautos y un poco más razonables para opinar, y que no se descarte ninguna posibilidad” concluyó.