El despacho que dejó Miguel Isa en el primer piso del Centro Cívico Municipal, y que hoy ocupa Gustavo Sáenz, aún tiene las paredes y estanterías semivacías. Algunos cuadros con imágenes de la ciudad decoran las blancas paredes.

No hay fotos familiares, pero sí algunos clavos solitarios que habían servido de sostén de cuadros de Evita y Cristina Fernández que el exjefe comunal habrá trasladado a su nuevo despacho del Grand Bourg. 

Distendido, el intendente Sáenz realizó un balance de sus 100 primeros días al frente del municipio. 

La herencia isista, presupuesto, obra pública, espacios verdes y planificación fueron algunos de los temas abordados durante la entrevista: 

¿Qué municipio recibió por parte de Miguel Isa?

La verdad que en el balance que uno va haciendo en el día a día de gestión se va encontrando con muchas cosas que se hicieron mal y con otras que se hicieron bien. 

Yo no soy una persona de mirar el pasado, vivo el presente y trato de afrontar al futuro.Creo que logramos, en estos 100 días de gobierno, cosas que no se hicieron durante 12 años y que son importantes. Pero por sobre todas las cosas destaco que estamos recuperando la autoridad que el municipio había perdido en la ciudad.

Para marcar el rumbo de la gestión indefectiblemente tiene que mirar para atrás por más que no quiera…

Sí, evidentemente uno cuando se sienta y ve los números se da cuenta de las necesidades que tiene el municipio y de las deudas que tenía también, entonces afrontar las deudas anteriores. Estamos honrando las deudas, estamos pagando cheques diferidos, mucha publicidad atrasada, haciendo obras que no se hicieron o que se hicieron mal con empresas que no correspondían. Y bueno en definitiva buscamos resolver esto a futuro para que no nos vuelva a ocurrir.

Para eso creamos secretarías que no existían, como la de Modernización, para que tengamos en claro cuántos empleados tenemos y en qué condición están, en dónde trabajan o prestan servicios y cuáles son sus funciones, porque en esta nueva etapa, en donde atendemos desde las 8 hasta las 20, necesitamos saber el recurso humano con el que contamos.

Necesitamos funcionarios en la calle, hablando con los vecinos para conocer en profundidad sus necesidades, no sentados en sus escritorios. Quiero que controlen que las cosas se hagan como se deben. Las empresas que presten servicios para la Municipalidad y no realicen los trabajos según lo establecido en el contrato no podrán ser nuevamente contratadas para desempeñarse en tareas del municipio. Además serán multados según cómo lo establece la normativa vigente.

¿Cómo afronta el primer año de gestión con un presupuesto bastante ajustado?

Es un año complicado en lo económico por el contexto nacional, provincial y del cual los municipios no nos vemos exentos. De hecho el planteo que se está haciendo a nivel nacional tiene que ver con los recursos, por la coparticipación y lo está haciendo el gobernador de la provincia a través de sus diputados y senadores, o hablando personalmente con el ministro (Rogelio) Frigerio. Yo también tuve la oportunidad de decirle al Presidente y al Ministro del Interior que los municipios también necesitamos rever nuestra coparticipación. De hecho, la nuestra es del año 70 y desde entonces tenemos la misma coparticipación y la verdad creo que hay reverla. La ciudad de Salta tiene la mitad de habitantes de la provincia y cuenta con un presupuesto bastante limitado. 

Usted había reclamado por más presupuesto a provincia y había solicitado ayuda a nación…

El municipio tiene un presupuesto del 30% de recaudación propia y el otro 70% lo componen los recursos coparticipables que por ley deben llegar. Después había otros ítems, que son los que planteé los primeros días de gobierno en donde los municipios, y en el caso de la Capital, recibían una ayuda discrecional por parte de la Provincia. Después de mucho discutir entendimos que la situación financiera de la Provincia y la Nación estaba complicada y que hasta que no se resuelva la situación de los fondos que se adeudan a la provincia no íbamos a poder realizar ningún tipo de gasto extraordinario ni que nos eleven los recursos.

Tenemos la esperanza de que con el paso del tiempo, cuando las cosas estén más tranquilas o más claras, podamos acceder a esos recursos.

En materia de obra pública, ¿qué se puede proyectar con los recursos propios? 

Tenemos 50 frentes de obra en diferentes puntos de la ciudad. El clima no nos ayudó mucho en estos meses para avanzar con las obras, pero estamos cumpliendo con el desmalezamiento de los espacios públicos, la limpieza de los canales, 50 frentes de obras, baches de calles, quedan cosas por hacer pero las estamos haciendo con los recursos que tenemos. 

También limitamos el gasto en muchos otros casos para priorizar lo que el vecino espera. Mejoras en la atención al vecino para que sus impuestos vuelvan en forma de obras, brindando mejores servicios, ofreciendo espacios limpios, esa es la impronta de esta nueva gestión. 

Queremos recuperar los espacios públicos y tenemos un importante trabajo en este sentido, porque son de todos los salteños y no podemos dejar que se ocupen.Hablamos del respeto irrestricto a la normativa, la Ordenanza y la Ley para que se cumpla y comenzamos una fuerte campaña contra aquellas personas y vecinos que tienen baldíos descuidados, generando problemas en los vecinos y en general a toda la ciudad. Hicimos una campaña de concientización en este sentido. Multamos a muchos de ellos y pusimos baldíos notificados para que los propietarios se dieran cuenta que debían modificar su actitud por el bien de todos. 

Por su geografía Salta creció de norte a sur y en ambos extremos pareciera que el vecino virtualmente se ha caído del sistema municipal. ¿Cómo se hace para reincorporarlos?

Hay que buscar que las obras se descentralicen. En San Luis tenemos muchos vecinos y las obras no llegan. Queremos que la gente no tenga que trasladarse. La gestión anterior unificó todo acá pensando que era lo mejor, y quizás en ese momento fue lo mejor, pero ahora la gente reclama mayor atención y mejores servicios en distintos puntos de la ciudad. A la gente le cuesta mucho venir hasta el Centro Cívico y es por eso que planteamos a través de la modernización extender el servicio de atención a las diferentes zonas, pero que tengan respuesta, con una atención como corresponde, sino son lugares para quejarse pero no para encontrar soluciones. 

¿Cómo se proyecta una ciudad a futuro teniendo en cuenta el trabajo realizado con los PIDUAS?

Nosotros vamos a seguir ese plan porque la gente que los hizo es muy capacitada y de hecho me parece espectacular lo que se plantea en el Pidua II respecto al Río Arenales, los planes de desagües pluviales, donde ya tenemos un compromiso asumido del Presidente y del titular del Plan Belgrano para hacer estas grandes obras y de ahí tenemos muy buenos proyectos de obras que se pueden encarar solo con recursos. 

Hasta ahora es un sólo catálogo de buenas intenciones… 

Es un catálogo de buenas intenciones y de muy buenas ideas, pero sin recursos no podemos avanzar en obras y yo voy a convertirme en un gestor de obras para Salta porque logré una buena relación con el gobierno nacional a través de mi instalación nacional cuando fui candidato a la vicepresidencia y eso me ayuda a abrir muchas puertas que antes no se abrían. Entonces creo que es importante trabajar dejando atrás las vanidades, y trabajar conjuntamente con el gobernador y la nación para conseguir recursos para Salta. Esto me parece fundamental en esta nueva era que empezó el 10 de diciembre, debemos entender que la única manera de crecer es trabajando todos juntos. 

Teniendo en cuenta la proliferación de vendedores ambulantes y la instalación de ferias en el microcentro, ¿cómo se recuperan los espacios verdes?

Primero con control y respeto por las normas; cuando uno deja hacer pasan estas cosas. Como decía al principio, el municipio perdió autoridad con la gente, la gente le perdió el respeto a las ordenanzas y cada uno hacía lo que quería. Con el convenio que firmamos días atrás con la provincia de cooperación mutua, porque para mantener los espacios públicos debemos controlar, persuadir, necesitamos de la Policía y la Dirección General de Rentas, y a partir de ahí analizar esta problemática porque también es una problemática social y por detrás de ella hay algunos que se aprovechan de la situación y hay empresarios o gente que trae mercadería de forma ilegal y utiliza a la gente para que las venda en diferentes sectores de la ciudad, vamos a controlar eso también trabajamos con el Ministerio de Trabajo para incluir a los ambulantes. 

Otras de las polémicas generadas en referencia al espacio público es la posible creación de zonas rojas en la ciudad, ¿cómo se avanzará con esto?

Es un tema complejo que posee aristas que se derivan por distintos lugares. Es una realidad que debemos asumir, hay gente que vive en el barrio Hernando de Lerma, Villa Soledad, en las inmediaciones del Parque San Martín y desde hace tiempo viene sufriendo las consecuencias de la falta de control y la falta de respeto a la ley de contravenciones. 

Los legisladores, a través de una legislación, le dicen al municipio que puede instalar una zona roja o de convivencia para que las personas que ejercen la actividad puedan hacerla de forma tranquila. A partir de ahí empieza el debate, pero yo no quiero ser el que convierta a Salta en la primera ciudad con zona de convivencia. No me gustaría ser el primero en hacer eso pero de hecho hay que buscarle una solución. Actualmente, sin estar autorizada, existe una zona roja y que lamentablemente es una zona donde viven muchas familias. 

Algunos concejales sostienen que deberían volver los cabaret para poder visibilizar el ejercicio de la prostitución y controlar a las personas que la ejerzan. ¿Cree que esto es posible?

Yo creo que debemos terminar con la hipocresía porque muchas veces se toman medidas coyunturales que después tenés que volver atrás. Yo soy un partidario que tiene que haber lugares para todo. Como planteo que el paseo Balcarce perdió su espíritu y dejó de ser un paseo para la familia, un paseo para los turistas y se convirtió en un lugar que no queremos, también creo que debe haber lugares que puedan permitir actividades que algunos les parece bien y a otros no, pero hay que dejar de lado la hipocresía y sentarse a discutir realmente. 

No puede ser que nosotros siempre vayamos detrás del problema. Yo siempre digo que los cabarets y las casas de tolerancia se clausuraron después del escándalo que hubo con un exintendente, si no hubiese pasado eso, hubieran seguido y de hecho nosotros estamos controlando que no hayan pero en la realidad no puedo dar con certeza y seguridad que existen o no con los controles. 

A partir de la discusión hay que empezar a ver que tiene que haber lugares para boliches, y no mezclamos los pubs con los bailables. Lugares para menores de edad, para que también tengan lugar porque si no nos encontramos con menores en boliches no permitidos a altas horas de la noche consumiendo alcohol por la falta de control. 

Mirando al 2019, ¿se considera un buen candidato a gobernador?

Para ser un buen candidato a gobernador, primero tengo que ser el mejor intendente de Salta.