Hoy reabren la confitería de la Terminal de Ómnibus

Tras nueve meses cerrada, hoy reabrirá sus puertas el bar y confitería de la Terminal de Omnibus de Santa Rosa. El edificio fue reacondicionado por su nuevo concesionario, Ronaldo Gonzalía, quien llevará adelante el emprendimiento secundado por siete u ocho personas que comenzarán a trabajar en el lugar.

"Para los usuarios de la terminal de micros es una buena noticia. Desgraciadamente en la ciudad después de la 1 de la mañana no se puede ir a ningún lado. La terminal estará abierta las 24 horas del día. Vamos a tratar de ofrecer productos de primera calidad. Lo básico lo hacemos de buena calidad", dijo durante una entrevista con Radio Noticias.

Como nuevo.

Ayer, un equipo de LA ARENA visitó el lugar. Eran las 17.15 y las puertas tenían carteles que indicaban que estaba cerrado. Detrás de las puertas vidriadas que dan al hall de la terminal podía verse el trabajo de Gonzalía y sus colaboradores, ultimando los detalles para la puesta en marcha del bar.

Una vez adentro, se pudo apreciar que el sitio luce como nuevo. Posee veintiocho mesas (algunas puestas de a pares), con sillas de metal y plástico en colores rojo y negro, junto a una barra en la que luego iban a colocar banquetas. El lugar estará climatizado con tres split de 6.500 frigorías y el público podrá ver televisión gracias a dos pantallas Led de 40 pulgadas y conectarse a Internet a través de Wi-Fi (el servicio estaba siendo tramitado con un proveedor local). 

En las paredes lucirán fotos que reflejan la historia de Santa Rosa. Parte del mobiliario con el que se encontrarán los asistentes también tiene relación con el pasado de nuestra ciudad, pues perteneció a la bombonería La Reina.

Menú.

Gonzalía anticipó que la cafetería y la sandwichería serán los fuertes, pero que también contarán con un menú ejecutivo diario, como ensaladas. Aclaró sin embargo que el bar y confitería de la Terminal no es un restaurante.

Los precios no estarán por encima de los que hoy cobran los bares tradicionales del centro de esta capital, según explicó el concesionario. "No queremos que los precios sean causal de que la gente tilde la confitería de la Terminal de que no pueda tomarse un café. Queremos hacer una promoción de café con dos medialunas por 20 pesos. Apuesto a que la gente ingrese por el precio, la calidad y la higiene", dijo. 

Atención.

Respecto a las personas que trabajarán a diario en la confitería, con él incluido, serán ocho en un principio, entre empleados y familia. "Se trata de gente conocida, amiga. Gente grande que supera los 40 años. Gente joven para la atención. Pero en cargos de responsabilidad gente que supera los 50, que no conseguimos laburo (sic) en ningún lado. Hoy la tendencia en gastronomía es tomar empleados por arriba de los 45 años. Estudios de mercado dan cuenta que esa es la tendencia. Más edad, más responsabilidad", explicó. 

Los baños, ubicados en la parte exterior, no serán responsabilidad del concesionario, sino que su mantenimiento estará a cargo de la municipalidad. Actualmente están en refacción. El canon que pagará Gonzalía será de 6.500 pesos en el comienzo. 

Abandono y licitaciones fallidas

Durante casi todo el 2014, la confitería de la Terminal de Omnibus permaneció cerrada. Los pasajeros de los micros que hacían trasbordo en Santa Rosa o paraban por algunos minutos, no encontraban un espacio donde comprar una bebida o algo para comer. Tampoco tenían la posibilidad de desayunar quienes llegaban desde el interior provincial en horas tempranas para realizar trámites, compras o visitar un médico.

En mayo pasado este diario denunció a través de un artículo periodístico el estado de abandono general en el que permanecía la Terminal. Un mes después, un equipo de cronistas comprobaría que las cosas no habían cambiado a pesar del estado público que había tomado el malestar expresado por vecinos y viajeros.

En los últimos días, el municipio realizó arreglos en los andenes e inició la refacción de los baños. Además, tras dos licitaciones fallidas, logró adjudicar la concesión de la confitería a uno de los oferentes, quien propuso pagar 6.500 pesos de canon con un ajuste anual del 10 por ciento a partir de 2016. Gonzalía tendrá a cargo el espacio durante seis años con opción de prorrogar el contrato por dos años más.

Comentá la nota