Como en el comienzo del año, vuelve a tensarse la relación entre el gobierno provincial y los gremios de la educación, que ya confirmaron que el lunes y martes de la semana que viene harán para. Por su parte, el sciolismo anticipó que “de confirmarse el paro de 48 horas, se descontarán los días de huelga en la próxima liquidación”.

El Frente Gremial Docente sostuvo que “requerimos en forma inmediata, se incluya en la agenda de la Comisión Técnica Salarial de la Paritaria Docente -actualmente en pleno funcionamiento- el monitoreo por parte del Gobierno en conjunto con las entidades gremiales, sobre los índices del costo de vida y la evolución de los precios durante los meses transcurridos desde marzo del corriente año”.

Hoy, el jefe de Gabinete, Alberto Pérez, explicó que "seguramente intentaremos de aquí al lunes poder juntarnos para ver los temas que se pueden ir encaminando, los no salariales".

Después, el funcionario bonaerense dedicó unas líneas a los cuestionamientos por la implementación de la doble escolaridad: “Es un momento que estamos sufriendo embates especulativos que son de público conocimiento. Hay sectores que tienen en riesgo los puestos de trabajo, por eso la convocatoria de hoy”.

Desde el sciolismo también salió a hablar el subsecretario de Coordinación Económica, Agustín Lódola, quien desestimó el pedido de los docentes, a la vez que subrayó que “no existe pérdida del poder adquisitivo ya que el sueldo del maestro de grado ingresante, tuvo un incremento del 26% entre marzo y junio, y la inflación minorista fue del 7,3% en el mismo período”.

"En agosto se percibirá el segundo tramo del aumento salarial acordado, lo que representa un incremento adicional del 10% para el docente ingresante de jornada simple", arguyó Lódola.

Por último, sostuvo un punto que traerá polémica: "Claramente el contexto macroeconómico actual no amerita ninguna nueva discusión salarial, la inflación se ha desacelerado fuertemente y hoy los esfuerzos de todos los sectores pasan por cuidar los puestos de trabajo”, y agregó que “la política salarial del gobernador Daniel Scioli ha sido siempre muy activa, tratando de potenciar un motor fundamental como el consumo, en el marco de sustentabilidad de las finanzas publicas provinciales".