El director de Atención Primaria de la Salud, Jorge Poleschi, confirmó a este medio que en el transcurso del año se incrementaron fuertemente los casos de tuberculosis, una enfermedad respiratoria que suele asociarse, en muchas situaciones, a deficiencias alimenticias y habitacionales. Hasta el momento se cuentan 44 personas infectadas, un número que casi duplica la cantidad contabilizada en 2015, con 27 casos.

El Ameghino es el principal barrio afectado, seguido por La Loma. En ese contexto, desde hace varios meses se registran inconvenientes con la provisión de la medicación correspondiente, que Nación debe enviar a cada provincia y de ahí a los municipios.      

- ¿En cuánto se incrementaron los casos de tuberculosis?

- Con relación a años anteriores hemos notado desde mitad de año un incremento en la cantidad de casos, tanto en la faz privada como en la faz hospitalaria. Algunos son de partidos vecinos, como Las Heras, de donde tenemos dos o tres casos. Otros son detectados en el Hospital por consultas realizadas en consultorios externos o pacientes que son internados con alguna patología neumonológica y después se confirma que es tuberculosis. La incidencia tiene oscilaciones. Veníamos de un período de descenso, después se estabilizó y este año aumentó. Hay algunas particularidades. Creo que en Luján hubo una gran cantidad de asentamientos últimamente, y eso ha provocado que la patología se modifique un poco. Por ejemplo, un porcentaje importante de estos últimos diagnósticos corresponde a personas que no son argentinas y con antecedentes de familiares que ya habían sido tratados por esta patología en Luján. Eso ha hecho que el número se incremente. También hay grupos familiares enteros que se han establecido en las zonas aledañas para trabajar en quintas, y eso ha incidido en el aumento de casos. 

- ¿Cuántos casos llevan registrados en lo que va del año?

- Son 44 casos. El año pasado a esta altura teníamos 27 casos.

- ¿A qué obedece este incremento?

- En estos casos estoy incluyendo también a pacientes con dificultades mentales, como por ejemplo en la Colonia Montes de Oca, que también son declarados en el partido de Luján. Todo factor que provoca inmunodepresión, una disminución en las defensas, condiciona que aparezca esta enfermedad. El problema de trastornos mentales es uno de ellos, como también situaciones de diabetes, o nuevas drogas que han aparecido para tratar cuestiones reumáticas o artritis, porque son drogas que bajan las defensas. Incluso contamos con docentes u otros profesionales que están en tratamiento. También una alimentación inadecuada o escasa es uno de los factores que está influyendo mucho en esta situación. 

- ¿En qué barrios se registra la mayor cantidad de casos?

- En este momento el barrio con más casos y complejidad es el barrio Ameghino. En realidad desde hace bastante tiempo tenemos casos muy complicados en ese barrio. Casos derivados de drogadicción, problemas de pésimo estado alimenticio, gente sin trabajo. La Loma es otro barrio donde se registran algunos problemas de este tipo. 

- ¿En cuánto inciden las condiciones habitacionales? 

- En mucho. Tienen mucha incidencia las condiciones alimenticias y ambientales donde la persona reside. Pero lo más importante es la alimentación. Una alimentación inadecuada hace que las defensas se deterioren. 

- ¿Qué se proyecta como intervención estatal de cara al año que viene?

- Casualmente tenemos algunos inconvenientes con respecto a la medicación que es comprada por Nación y distribuida a Provincia, donde se distribuye a las Regiones Sanitarias. En estos momentos estamos con inconvenientes. No sé dónde está el problema, si en Nación o en Provincia. En estos días aparentemente se normalizaría la entrega. De no ser así, el Municipio contempla la posibilidad de comprar la medicación para garantizar su provisión, que en estos casos debe ser gratuita. 

- ¿En Luján falta medicación o escasea?

- En algunos municipios está faltando, tal es así que desde algunos municipios nos han pedido. Nosotros tuvimos la suerte de contar con un stock, porque este problema viene de dos o tres meses. Hasta acá estamos llegando. Si en esta semana no se regulariza la entrega, el Municipio va a tener que comprar medicamento. Estamos esperando un llamado de la Región Sanitaria. Es una asociación de medicamentos que individualmente son económicos, pero hay un solo laboratorio que produce tres drogas juntas. Tenemos que comprar drogas separadas que dificultan el tratamiento porque representaría incrementar la cantidad de comprimidos que tiene que tomar un paciente. Pero pienso que no va a ser un problema, de alguna u otra forma el tema se va a solucionar. 

- ¿El inicio de tratamiento debe hacerse en los propios centros de salud?

- Generalmente el inicio del tratamiento se hace donde se realiza el diagnóstico. Una vez dada de alta la persona, tiene que continuar con el control, ya sea en el Policlínico o en los CAPs más cercanos al domicilio. Se trata de un tratamiento supervisado para cortar con la cadena epidemiológica. Es muy difícil porque la enfermedad todavía genera prejuicios y provoca que muchos pacientes no accedan a los centros de salud a tomar la medicación. Eso es un trabajo que se realiza en equipo, con la promotora de salud y las trabajadoras sociales. El tratamiento supervisado es lo único que nos garantiza que el paciente se cure. Esta enfermedad tiene la particularidad de que uno mejora rápidamente, lo que no significa que esté curado. Ese trabajo tiene muchas dificultades por el hecho de que hay que convencer al paciente de la necesidad de que lo haga de manera supervisada. El porcentaje de abandono en el tratamiento sigue siendo alto. Son tratamientos de seis meses. No solamente hay que controlar al paciente, sino que cuando aparece un caso índice, tenemos la obligación de controlar a todo el grupo familiar o a todo el entorno de convivientes. Eso origina una movilización de mucho personal. Generalmente estos grupos familiares viven en condiciones de hacinamiento o en terrenos en donde hay tres o cuatro casas y en cada casa hay muchas personas.

¿Qué es?

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la tuberculosis es una enfermedad causada por una bacteria, que en general, afecta los pulmones. Es curable y prevenible.

La enfermedad se transmite de persona a persona a través del aire por medio de la tos o el estornudo. Se calcula que una tercera parte de la población mundial tiene tuberculosis latente; es decir, esas personas están infectadas por el bacilo pero todavía no han enfermado ni pueden transmitir la infección. El mayor peligro apunta a quienes tengan su sistema inmunitario debilitado por VIH, malnutrición o diabetes.

La OMS explica que “cuando la forma activa de la enfermedad se presenta, los síntomas (tos, fiebre, sudores nocturnos, pérdida de peso, etcétera) pueden ser leves durante muchos meses”. Como resultado de ello, “en ocasiones los pacientes tardan en buscar atención médica y transmiten la bacteria a otras personas”.

La tuberculosis es conocida como “la enfermedad de los pobres”. Si bien el perfil de personas que la padecen es variado, situaciones como la falta de alimentos y condiciones habitacionales precarias favorecen su proliferación. De hecho, los mayores índices de personas infectadas se registran en los países subdesarrollados.