Empieza el juego en la Ciudad

Empieza el juego en la Ciudad

El escenario político de cara a las elecciones legislativas de 2017 ofrece más interrogantes que certezas. Todos los espacios, que pugnan por ganar el distrito más importante del país, están desarrollando sus estrategias al mejor estilo de Von Clausewitz. Los números indican que doce son las bancas a renovarse en el Congreso nacional, y treinta […]

El escenario político de cara a las elecciones legislativas de 2017 ofrece más interrogantes que certezas. Todos los espacios, que pugnan por ganar el distrito más importante del país, están desarrollando sus estrategias al mejor estilo de Von Clausewitz. Los números indican que doce son las bancas a renovarse en el Congreso nacional, y treinta los escaños a cubrirse en la Legislatura porteña. Pero está en juego mucho más que eso en la Ciudad. Las piezas políticas se comienzan a mover lentamente en el tablero, y Revista Qué te lo cuenta.

El oficialismo conoce el valor simbólico y político de mantener el bastión PRO que detentan desde hace nueve años. Por esa razón, busca conformar, cuanto antes, el frente Cambiemos en la Ciudad. El mayor escollo que se le presenta al oficialismo porteño es el deterioro de la imagen del PRO en todo el país, incluida la Ciudad. La confirmación electoral le daría a Horacio Rodríguez Larreta el respaldo necesario para afrontar una reelección segura en el 2019.

Las últimas escaramuzas entre los legisladores del mandamás porteño y los que responden al líder de ECO, Martín Lousteau, manifiestan una continuidad en la disputa por la jefatura de la Ciudad. Larreta quiere garantizar la concreción de Cambiemos con la venia del radicalismo capitalino. No quiere volver a sufrir la angustia de otro escenario electoral tan reñido como el que padeció el entonces candidato de Energía Ciudadana Organizada (ECO).

El radicalismo aún no se define, pensando en la posibilidad de poder llegar con candidato propio a la compulsa por el Ejecutivo porteño en 2019. La invitación al embajador argentino en Washington a un congreso radical en Córdoba, a fines de febrero, es una señal evidente de ello.

Por otra parte, el peronismo porteño está en constante movimiento. El titular del PJ en la Ciudad, Víctor Santa María, planteó la realización de internas dentro del peronismo de la Ciudad. Además, pretende que se abra el juego a figuras como Alberto Fernández, Felipe Solá y Héctor Daer, todos en el Frente Renovador.

Dentro del Justicialismo porteño, se oyeron voces de resistencia a la renovación de autoridades. Fernando Barrera (apoderado del PJ porteño y dirigente de UPCN) fue crítico de la idea de Santa María de las internas para marzo de 2017. Plantea la apertura a otros espacios del peronismo ampliando la base política para constituir una alternativa en el 2017 y disputar en el 2019 la elección.

Otro referente del peronismo en la Ciudad es Juan Manuel Olmos, quien se separó del FpV y creó el NEP (Nuevo Espacio de Participación). Olmos, quien además es miembro de la Junta Electoral del PJ, mantiene conversaciones con dirigentes del massismo, que pretenden en su armado en CABA algo del PJ porteño.

El expresidente del Justicialismo en la Capital cuenta con el apoyo de varias agrupaciones y legislado-res. Entre ellas, las diputadas porteñas María Rosa Muiños y Silvia Gottero. Algunas de las agrupaciones que lo acompañan son “Desafío Bicentenario” y “La Vertiente”. Se en-cuadran, también en el NEP, varios dirigentes peronistas que no comulgan con lo que consideran el kirchnerismo más duro: La Cámpora.

Dentro del peronismo irrumpió también una vertiente basada en las enseñanzas planteadas en la encíclica Laudato Sí, del papa Francisco. Se incluyen en este espacio el legislador porte-ño Gustavo Vera (Bien Común) y Eduardo Valdés, exembajador K en la Santa Sede. El titular de La Alameda manifestó a Revista Qué su intención de formar un gran frente electoral junto a otros espacios peronistas y de centroizquierda. El legislador porteño se entusiasmó por confluir con otros dirigentes en una fuerza común alrededor de los ejes laudatistas.

Por su parte, la izquierda en la Ciudad aún no ha definido su estrategia de cara a las Legislativas. Todo indica que el Partido Obrero y el PTS seguirían nucleados en el Frente de Izquierda de los Trabajadores (FIT) con una lista unificada que llevaría a Myriam Bregman. Sin embargo, el MTS y MAS conformaron un frente para diferenciarse del FIT, cuyo principal referente en Capital Federal es Alejandro Bodart.

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