Las cacerolas sonaron fuerte en Plaza Moreno

Las cacerolas sonaron fuerte en Plaza Moreno
La protesta anti K fue masiva en La Plata. Hubo reclamos con cánticos, bocinazos e ingeniosos carteles con diversas consignas

El ruido de las cacerolas comenzó a crecer en la cálida noche platense de ayer. El volumen subió hasta aturdir y la plaza Moreno se fue poblando con una multitud de manifestantes pasadas las 20. Los convocó un sentimiento común: la bronca contra sus gobernantes, representados en el kirchnerismo y la presidenta Cristina Fernández.

Aunque los reclamos ayer en La Plata fueron diversos. Muchos repudiaban la actitud del gobierno ante el fuerte temporal del 2 de abril y pedían por los inundados. Otros reclamaban por más seguridad. Algunos exigían que se respete la Justicia y que se dé marcha atrás con la reforma K y gran parte también protestaba por la corrupción en el gobierno.

“Se va a acabar la dictadura de los K” y “qué se vayan todos, qué no quede ni uno solo”, fueron los cantos más escuchados anoche en plaza Moreno, además del Himno nacional, que hizo callar el ruido de las cacerolas cuando se entonó. Pero el reclamo se hizo más visible en las leyendas de los cientos de carteles que expresaron los mensajes de los manifestantes. Algunos en elaboradas pancartas, otros en simples cartulinas escritas con marcadores. “El poder cuenta billetes que roba al pueblo, el pueblo cuenta muertos que deja el saqueo”, decía uno. “Cuando la patria está en peligro todo está permitido menos no defenderla”, se leía en otro. También hubo alusiones a la corrupción: “La corrupción mata” se reiteró en varios.

“Con corrupción no hay justicia seria” o “la corrupción nos tapó más que el agua”, decían otros. La indignación por la inundación también se expresó en carteles. Una larga bandera que decía “indignados” se desplegó en medio de la movilización. “Yo ayudo sin pechera” decía otro cartel en alusión a las pecheras de la agrupación K La Cámpora. No faltó un cartel que recordó la frase del presidente uruguayo José Mujica a Cristina: “esta vieja es peor que el tuerto”. Ni tampoco la alusión al Papa Francisco con ironías a la presidenta: “Hebemus presidentus corruptus”. Y también hubo referencias al escándalo por lavado de dinero K en el que se reveló como sacaban del país dinero por kilos. “Mi sueldo pesa 0,00001 gramos”, confesaba el cartel de la marcha del 18A en La Plata.

La movilización fue copada por vecinos autoconvocado. No hubo identificaciones de partidos políticos, pero si hubo representantes de varios sectores. Desde sacerdotes a funcionarios judiciales.

Representantes de ONG o asociaciones de vecinos como Salvemos a La Plata o Vecinos indignados. A diferencia de otras movilizaciones también hubo representante de partidos políticos opositores como los diputados provinciales Oscar Negrelli (Coalición Cívica), Julio Garro (Pro) y Ricardo Jano (UCR), entre otros.

La iglesia salió a la calle

“Quiero acompañar a mi pueblo y pedir que haya justicia independiente”, dijo el padre José, de la Iglesia Rosa Mística, que se mezcló entre la multitud de representantes con una cacerola en la mano. “Que el gobierno no se olvide de su pueblo, especialmente de los más pobres y que no haga política fascista”, pidió el padre José entre el ruido de cacerolas.

Fiscal en defensa de la Justicia

El fiscal Marcelo Romero estuvo ayer en plaza Moreno, recordó que juró “defender la Constitución” y destacó que con la reforma judicial “lo que está en juego no es una bandería política, es la República que se pretende vulnerar”.

“Nuestros representantes no leyeron a Alberdi, a Sanchez Viamonte o a Bidart Campos, ni tampoco nuestra Carta Magna”, consideró. Y auguró que “ojalá esta manifestación los haga reflexionar” al oficialismo.

Comentá la nota