Los efectos de la pandemia se hicieron sentir en los sectores vulnerables de la comunidad. Y para mitigarlos con la rapidez necesaria que exige una crisis sanitaria, es importante que las personas puedan contar con las herramientas necesarias para fortalecer la prevención. Una de ellas es algo tan simple y elemental como el agua, tanto para su consumo como para la higiene personal: poder lavarse las manos con frecuencia, por ejemplo, es una acción imprescindible para evitar el contagio del coronavirus.

Entre las iniciativas solidarias que se vienen desplegando a causa de la pandemia, se destaca el programa “Higiene activa” en el conurbano bonaerense, que tiene como objetivo mejorar los hábitos de higiene de los niños y adultos que concurren a comedores y centros comunitarios. Se realiza con el apoyo de la instalación de filtros purificadores de agua, los cuales ayudan al acceso a una hidratación segura y a la vez permiten enseñar y concientizar sobre la higiene personal.

Se trata del plan encarado por una alianza entre Coca-Cola de Argentina y la empresa social Proyecto Agua Segura (PAS). En realidad, comenzó hace tres años, pero redireccionaron sus esfuerzos en esta etapa para ayudar a contener la curva de contagios en la pandemia. Desde mensajes de WhatsApp hasta posteos en Facebook, todos los canales sirven en “Higiene activa” para brindar información y consejos para prevenir el COVID-19, incluyendo desarrollos digitales propios con láminas, gráficos y videos.

Se instalaron filtros purificadores de agua en el Conurbano bonaerense e interior del país para acceder a una hidratación segura.

El impacto de  la instalación de filtros purificadores de agua es también muy importante en lugares del interior del país, donde se conocen historias de esfuerzo y necesidades. Es el caso, por ejemplo, de la Escuela 751 de Colonia Milagro, un pequeño poblado rural en la provincia de Misiones, rodeado de plantaciones de té. “Crecer y venir a la escuela en esta zona supone algunos desafíos que otros niños jamás van a experimentar”, relata Hilda Benítez, maestra desde hace 11 años en esa zona. Y detalla que  los chicos tienen que “transitar caminos muy difíciles todos los días para poder estudiar, cruzando cerros y montes, rodeados de animales salvajes”.

Ejemplifica también la importancia de contar con un filtro: “Por acá el agua está contaminada; los pozos, vertientes y arroyos no están bien protegidos y por eso es imprescindible llevar adelante todas las medidas necesarias antes de consumirla, como hervirla”.

Por su parte, Coca-Cola viene trabajando además en otras iniciativas que también tienen como objetivo el acceso al agua en poblaciones con necesidades de infraestructuras básicas.

Otro esfuerzo dedicado a la batalla contra el coronavirus fue la ampliación del respaldo a las iniciativas que participaron del Concurso de Agua, que Coca-Cola Argentina lleva adelante junto a la Fundación Vida Silvestre. En su 13° edición se premiaron tres proyectos, destinados a mejorar el acceso al agua en comunidades rurales y pueblos originarios del norte argentino. Pero ante la situación de pandemia se seleccionaron otros cinco emprendimientos, con un total de $6.750.000 aportados por la Fundación Coca-Cola.

Estos cinco proyectos están destinados a ampliar la  infraestructura para un hospital de día en El Impenetrable, en la provincia de Chaco (Fundación La Higuera); la instalación de unidades móviles e inteligentes con higienizadores solares en la Quebrada de Humahuaca (Fundación EcoAndina); el equipamiento del área de pediatría del hospital Jorge Vázquez de Tres Isletas, en el centro de la provincia de Chaco (Asociación Civil Escuela de Deportes Deportivo Maipú ); y finalmente, un plan de capacitaciones y provisión de insumos para comunidades campesinas y pueblos originarios de localidades de Jujuy, Salta, Santa Fe y Santiago del Estero, a cargo del Equipo de Producción y Construcción Alternativa.