La Universidad de Luján repudia la instalación de Monsanto

Lo hizo a través de una declaración aprobada días atrás por el Consejo Superior. Allí, la casa de estudios sostuvo que “repudia enérgicamente el asentamiento de la empresa Monsanto en las ciudades de Malvinas Argentinas y Río Cuarto y/o en cualquier otro lugar del territorio nacional”.
El Consejo Superior de la Universidad Nacional de Luján aprobó una declaración mediante la cual “repudia enérgicamente el asentamiento de la empresa Monsanto en las ciudades de Malvinas Argentinas y Río Cuarto y/o en cualquier otro lugar del territorio nacional”. El texto fue elevado al Consejo por la Lista Estudiantil 115, como Frente Universitario en el Movimiento por la Unidad Latinoamericana y el Cambio Social (MULCS).

A través de esa decisión, también se resolvió “apoyar a las comunidades movilizadas de dichas ciudades y de los distintos puntos del país que están organizándose a favor del debate público de esta problemática y solidarizarse con ellas”.

Copias del texto aprobado se enviaron a las demás universidades nacionales “para que se expidan y puedan adherir a esta declaración, si así lo consideraran”.

En los argumentos se mencionan “los acuerdos establecidos por el gobierno nacional con la empresa Monsanto para la radicación de una planta acondicionadora de semillas en la ciudad de Malvinas Argentinas y una estación experimental en Río Cuarto, ambas en la provincia de Córdoba”, y subrayan que “es deber de la universidad estar al servicio del desarrollo humano, de la defensa del medio ambiente y de la paz, a la vez de contribuir a la solución de problemas locales, regionales o nacionales, como lo establecen el artículo 1 y el artículo 33 del Estatuto Universitario de la UNLu”.

“El artículo 41 de la Constitución Nacional favorece la protección ambiental vinculada al irreductible derecho de gozar de un ambiente sano, equilibrado, apto para el desarrollo humano y para que las actividades productivas satisfagan las necesidades presentes sin comprometer las de las generaciones futuras”.

También indican que “la empresa Monsanto es una de las firmas con mayor número de condenas y denuncias con respecto a ocultamiento de información, publicidades engañosas, presiones a funcionarios públicos y contaminación ambiental”.

“El sistema productivo que sostiene dicha empresa es el de la concentración económica, genética y del conocimiento científico a través de las patentes –formas claramente monopólicas de control y dominación–; que genera producciones agrícolas altamente dependientes de insumos y que propende a la inestabilidad del sector y a la exclusión de aquellos productores que no se adapten a las innovaciones tecnológicas imperantes en el mercado”, expresa la declaración de la UNLu, en la que además se destaca: “No existe un informe de impacto ambiental hecho por entidad nacional alguna”.

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