Alto de Sierra sigue con problemas con la provisión de agua potable. Así lo aseguró el intendente Gustavo Núñez quien explicó que ahora el problema radica en que las cañerías están obsoletas y tienen que seguir dependiendo de la solidaridad de la Unión Vecinal del Richet Zapata.

"No tenemos cloacas y hay inconvenientes con el agua potable. Es en el límite entre 9 de Julio y Santa Lucía porque el agua potable la manejaba la unión vecinal de Alto de Sierra. Tuvimos inconvenientes con el pozo y después pensamos que se había roto la bomba por el tiempo de uso pero en realidad se rompió porque no había agua. Se compró una bomba, se hizo un sondeo del pozo y no se pudo resolver. La Unión Vecinal habló con la del Richet Zapata pero tenemos otro problema y es que las cañerías están obsoletas", agregó el jefe comunal en radio Light.

Núñez fue esta mañana a la reunión convocada por el Ministerio de Planificación e Infraestructura para poder hablar con el director Región Centro Cuyo del Ministerio de Hábitat y Desarrollo Humano de la Nación y así encontrar una solución al problema. 

El objetivo es poder financiar el proyecto y así alcanzar una solución. Por otro lado, planteó la necesidad de responder a otro problema que es el de escriturar loteos que llevan décadas sin escrituración. "Hay barrios que llevan 20 años en estas condiciones. Tenemos un ingeniero agrimensor y esto tenemos que sanearlo. Tenemos problemas con el loteo, todas son tenencias precarias y eso complicaría la ayuda de la Nación", puntualizó.

En referencia a esto, el municipio comenzó a realizar un trabajo de diagnóstico de certeza para responder al pedido de Nación.