En la última sesión del Concejo Deliberante de Mercedes se vivió una escena más que llamativa para lo que debe ser el día a día de un recinto legislativo. Es que, en el marco de la votación para definir la adhesión o no al pacto fiscal que envió la provincia de Buenos Aires a los distritos estalló la furia entre el oficialismo y la oposición.

Claro, el intendente peronista Juan Ignacio Ustarroz es uno de los integrantes del grupo de alcaldes del interior que rechazan el pacto fiscal y proponen una alternativa que contemple la idiosincrasia de cada una de las 135 comunas.

Sin embargo, a la hora de la votación el oficialismo fue derrotado y, conforme a lo que denuncia la oposición, grupos de choque que pertenecerían al peronismo irrumpieron en el palacio.

"No se vota, el Pacto no se vota", fue el grito de los manifestantes que esperaban afuera del HCD y luego ingresaron. Mercedes no es el primer distrito donde existen conflictos con trabajadores por la votación. En Berisso, incluso, el intendente radical Jorge Nedela ordenó reprimir las manifestaciones en contra de la adhesión.

En definitiva, la votación resultó favorable para Cambiemos, por 10 a 8. La oposición hizo valer sus escaños y logró superar a la unidad plasmada entre el kirchnerismo, el peronismo y el Frente Renovador.

Fue con el resultado puesto cuando comenzó la bronca de los presentes contra los ediles de la oposición que intentaron tomar el recinto y verse cara a cara con los concejales.

Desde Cambiemos apuntaron a Ustarroz como principal responsable por los hechos y los calificaron como una "expresión de irracionalidad, fanatismo y autoritarismo".

Asimismo, desde la Legislatura bonaerense se hicieron eco de lo ocurrido y cuestionaron las prácticas “democráticas” del kirchnerismo mercedino.