RP.- ¿Cómo surge la creación del PASEM?

El PASEM surge en un acuerdo entre los países que son los fundadores iniciales del Mercosur: Uruguay, Paraguay, Argentina y Brasil. Dentro del sector educativo del Mercosur se empieza a delinear este proyecto en un acuerdo con la Unión Europea para recibir una donación con una finalidad específica que tiene que ver con potenciar la posibilidad de los vínculos regionales para pensar políticas que tienen que ver con la formación docente a nivel regional.

Esto está relacionado también con un proceso donde ya desde el año 2005-2006 los países empezaron a tomar conciencia fuerte de que una parte importante de la mejora de los sistemas educativos se vincula con fortalecer y pensar con un criterio más regional y a largo plazo las políticas de formación y de desarrollo profesional docente.

Durante los ’90 una de las cosas que pasó fue que había quedado bastante desprestigiado el lugar del docente. Ya en los primeros años a partir del 2000 inclusive Brasil había acuñado un slogan que decía “el docente hace la diferencia”, pudiendo entender que efectivamente uno puede pensar una serie de cuestiones a nivel de las políticas macro, pero que no hay posibilidad de mejora de los sistemas educativos sin los docentes -que era un poco una cuestión que había empeorado en la década anterior con la idea de que si tenés buenos materiales, infraestructura, otras inversiones, en realidad la cosa va a funcionar-.

Entonces hay toda una serie de políticas a nivel inversión que empieza a visibilizar esa conciencia de que un factor fundamental para los procesos educativos y para la actividad y la calidad de los sistemas educativos es el trabajo con los docentes. En ese marco es que surge la idea de este proyecto que si bien es un proyecto del área de educación, en base a un programa de apoyo al sector educativo del Mercosur, lo que hace es un foco específico en los procesos de formación y desarrollo profesional docente pero sobre todo en este proceso a nivel de política regional.

RP.- ¿En qué año comienza a funcionar el programa?

El PASEM empieza a gestarse en el 2009. Todos estos procesos son largos. No es que un día se gesta y al día siguiente se lanza, fueron una serie de reuniones, discusiones y acuerdos; y finalmente el programa empieza a funcionar en marzo del 2012.

RP.- ¿Y cómo es el trabajo con las instituciones?

En realidad las instituciones existen antes y por fuera del PASEM; o sea que lo que nosotros hacemos es hacer una serie de acciones que potencien el trabajo de las instituciones que existen pero fundamentalmente que potencien ese trabajo con esta perspectiva regional. Por ejemplo, una de las actividades que hicimos es un llamado a concurso para subsidios a redes de instituciones de formación docente.

Las instituciones públicas de formación docente, las universidades o en institutos superiores tenían la invitación a formar redes de tres o cuatro instituciones de por lo menos dos países para juntos presentarse a una subvención que les permite desarrollar durante veinte meses de manera colaborativa, primero un diagnóstico de sus problemáticas y después alternativas de soluciones a esas problemáticas para la mejora de los procesos de formación que no necesariamente tienen que ser idénticos los procesos pero sí esta posibilidad de idear la mejora en ese diálogo en el trabajo de la red.

Las instituciones están lo que nosotros hacemos es como un apoyo para que estas instituciones empiecen a tener vínculos de trabajo compartido y ya no sólo las instituciones de un mismo país sino que convocamos a que por lo menos dos países se unieran y esto permite generar vínculos interinstitucionales en la región.

RP.- ¿La UNLP es una de las instituciones?

La UNLP es una de las instituciones solicitantes que ganó una de estas subvenciones. Así que esto le permite trabajar junto con instituciones de los otros países. En la web del PASEM se ve cómo están conformadas las distintas redes, como una institución de Tierra del Fuego trabaja con una institución de Uruguay, Colonia o una de Paraguay está trabajando con una del norte de Brasil y con institutos de la provincia de Córdoba. Esa es la idea es que además el programa de alguna manera estimule esta posibilidad de intercambio entre instituciones de distinto tamaño, algunas localizadas en centros urbanos, otras en lugares más alejados y esto es realmente muy interesante porque son distintas, con distintas problemáticas pero que puedan trabajar juntas.

RP.- Haciendo un diagnóstico en la región, ¿falta mucho por hacer en ese sentido?

En el terreno de la formación docente estos países han hecho numerosos avances en la última década en relación a acuerdos entre las jurisdicciones para poner la mirada sobre aquello que importa. Hay como un proceso en paralelo de estos países donde por un lado se puso fuertemente la mirada en los procesos de formación docente pero además también en pensar políticas que no sólo dieran protagonismo a las instituciones de formación docente sino a los docentes que se están formando, con otros niveles de participación, con otra apertura a la cobertura de las instituciones que forman docentes, otra preocupación para que más jóvenes se interesen por la carrera docente.

Obviamente, con las singularidades de cada país es algo que es una tendencia en la región. No por nada los cuatro gobiernos aceptaron y eligieron poner con el PASEM el acento en la formación docente, o sea esta no es una preocupación que viene con el programa sino todo lo contrario, es el resultado de esta toma de conciencia de que este es un factor fundamental para los sistemas educativos de nuestros países.

RP.- ¿O sea que hay un cambio en el modelo?

Sí, de un modelo que decía que el docente es lo de menos a entender que la formación docente es un tema sustantivo.

Siempre hay mucho para hacer pero hoy nadie te diría que da lo mismo cómo se forma el docente o que da lo mismo si el docente tiene oportunidades o no de desarrollo profesional o que no importa cuál es el tipo de política que pensás para fortalecer estos procesos, es algo que ninguno de los cuatro países diría, ni ninguno de la región, hay una fuerte toma de conciencia en este sentido.

El PASEM trasciende la política pública de cada uno de los países y ese es el plus importante cuando estamos pensando en el derecho a la educación para todos y en una patria más grande que trasciende la frontera de cada uno de los países.

Este programa es como una oportunidad, una estrategia que se han dado los cuatro países para potenciar y estimular una mirada regional. Cada uno de los países en sus propias políticas, en su propio desarrollo está tomando este tema como algo importante.