La llegada del verano genera que los chicos dejen la escuela y tengan otros hábitos: más juegos al aire libre, más playa o pileta, que con un poco de mala suerte pueden derivar en algún golpe o en una enfermedad de las consideradas “de verano”.

Por tal motivo, 0223 consultó al jefe de Guardia del Materno Infantil, doctor Miguel Alberto José, que informó que durante esta temporada estival, el hospital atiende entre 300 a 350 nenes por día.

“Son números similares a otros años y de estos, un 25 a 30% son por traumatismos. También es un porcentaje normal y afortunadamente está lejos del 50% que se dio el pasado invierno, cuando los chicos  por el frío, permanecen más tiempo dentro de sus hogares”, sostuvo el profesional.

Otra de las patologías que fueron habituales para los doctores del hospital público de Castelli 2450 fue el de la gastroenterocolitis, enfermedad “habitual” en verano.

“La gastroenterocolitis se suele dar cuando hay periodos de mucho calor, como el que sucedió en las últimas semanas, cuando se superaron los 30 grados. Se suele contraer en el mar o en una pileta o por los alimentos y depende si es virósica o por toxicidad”,  explicó José.

Por tal motivo el profesional recomendó el lavado de manos, consumir alimentos bien cocidos así como evitar automedicarse.

“Se suele tomar antidiarreicos o un sertal y eso está contraindicado: pueden ocultar síntomas como una peritonitis. Hay que ir al médico para su diagnóstico. Lo que sí está bien es darle al enfermo mucha agua fresca, con hielo o sales de rehidratación oral. Y alimentos como arroz, polenta con un poco de aceite o queso o manteca, un churrasco, una pechuga o puré de zanahoria. Todo es apto y saludable para los chicos”, aconsejó el jefe de guardia del Materno.